Zelenski critica la «falta de confidencialidad» de EE.UU. con su petición de misiles Tomahawk

Las fuentes del periódico estadounidense afirman que el líder ucraniano no ha convencido a la Administración Biden sobre el uso que daría a los Tomahawk. Además, apuntan, el número de proyectiles que Estados Unidos y otros aliados pudieran suministrar sería insuficiente para la lista de objetivos rusos.

Los misiles Tomahawk estarían incluidos en el «paquete de disuasión no nuclear» previsto en el Plan de la Victoria. La estrategia ideada por el presidente ucraniano para iniciar el camino hacia el fin de la guerra que Rusia inició fue recibida con tibieza por los aliados. Los planteamientos de Zelenski se hicieron públicos ante la Rada Suprema a mediados de mes tras ser presentados en una amplia gira diplomática a los principales países occidentales: EE.UU., Reino Unido, Francia, Alemania e Italia. Pero solo algunos puntos fueron dados a conocer de manera parcial. El liderazgo del país en guerra mantuvo en secreto detalles como la petición de los Tomahawk a Washington, ahora confirmada por el propio Zelenski. «Se trataba de información confidencial entre Ucrania y la Casa Blanca. ¿Cómo interpretar estos mensajes?«, sentencia el líder ucraniano.

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A la iniciativa de Finlandia y Noruega se han sumado también países no pertenecientes a la UE como Estados Unidos, Canadá, Noruega y el Reino Unido.

El primer punto del planteamiento de Zelenski para, según sus palabras, poner fin a la guerra en 2025 era una invitación formal a la OTAN. Ante la reticencia de algunos miembros a cumplir este punto, a Ucrania se le prometió la entrega de defensa aérea. «Cuando nos dijeron que no podían admitirnos en la OTAN durante la guerra, nos prometieron seis o siete sistemas para proteger nuestros cielos», afirmó el presidente ucraniano. Sin embargo, todavía no están en el país.

A pocos meses de cumplirse el tercer aniversario de la invasión a gran escala, Ucrania afronta los momentos más oscuros del conflicto. El ejecutivo ucraniano está intentando concretar el apoyo militar de EE.UU. antes de las elecciones presidenciales. Y, a pesar de ello, los suministros no está llegando. Zelenski afirmó que «Ucrania ha recibido sólo el 10% del paquete de ayuda aprobado por el Congreso estadounidense en 2024». A escasos días de los comicios, en Kiev hay temores de que una victoria del candidato republicano Donald Trump suponga el recorte de los paquetes de ayuda al Ejército ucraniano.

La situación en el frente de guerra es extremadamente complicada, especialmente en la región de Donetsk. El Ministerio de Defensa ruso confirmó el pasado martes su control sobre la localidad de Selídove, situada a unos 18 kilómetros del importante enclave logístico de Pokrovks, de vital importancia para sostener el suministro a las líneas defensivas de esta provincia del este de Ucrania. Con la caída de Selídove, los rusos afianzan su ofensiva hacia Pokrovks. Las autoridades locales de esta ciudad anunciaron que algunas aéreas estarán bloqueadas. «Llamo a la gente a evacuar, porque la ciudad quedará completamente bloqueada«, dijo en el medio público Suspline el alcalde, Serhii Dobryak.

Los avances rusos se acumulan durante las últimas semanas y algunas voces en Ucrania achacan parte de la conquista a la falta de defensas. Según el periodista Yuri Butusov, redactor jefe del medio Censor.Net, «el tiempo no fue aprovechado por el mando militar ni las administraciones militares y civiles para preparar la defensa en las fronteras. Nada fue planeado adecuadamente».