La viuda de Navalni asegura que Putin será «castigado» por la muerte de su marido: «Debemos luchar contra esta dictadura»
Yulia Navalnaya interviene, de forma inesperada, en la Conferencia de Seguridad de Múnich tras recibir la noticia a través del abogado de su esposo
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Corresponsal en Berlín
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Iniciar sesiónNingún miembro del Gobierno ruso ha sido invitado a esta 60ª edición de la Conferencia de Seguridad de Múnich, pero Putin ha enviado su tarjeta de visita más macabra. La noticia de la muerte de Navalni fue publicada por las autoridades rusas apenas unos ... minutos antes de la inauguración, ayer, del evento considerado como el Davos de la Defensa, que reúne a 50 jefes de Estado y Gobierno de todo el mundo y al que Navalni, al contrario que Putin, sí estaba invitado. En su nombre asistía su mujer, Yulia Navalnaya, que apenas daba crédito a los teletipos moscovitas. «Putin miente mucho», se repetía a sí misma, compartiendo así con las más altas esferas de la defensa global su primera fase del luto, la de la negación. Pero apenas pudo contactar por teléfono con su suegra, Lyudmila Navalnaya, confirmó el peor de los pronósticos.
El responsable de la reunión, el diplomático alemán Christoph Heusgen, fue el primero en expresar su pésame y todo su apoyo a la viuda, que en lugar de venirse abajo pidió que le hiciesen hueco en el programa para subir a la tribuna de oradores y dirigirse desde allí al mundo. «No sé si debemos creer las terribles noticias que recibimos solamente de los medios estatales rusos porque ustedes lo saben desde hace muchos años, no podemos creer a Putin, a su Gobierno. Siempre mienten», comenzó dejando todavía la puerta abierta a una última esperanza. «Pero si es verdad, me gustaría que Putin sepa... y que todo su personal, todos los que le rodean, su Gobierno, sus amigos, que todos sepan que serán responsables de lo que han hecho con nuestro país, con mi familia y con mi esposo».
Convertida en un icono global del dolor y de las víctimas que deja Putin a su paso, dirigió su mensaje a todos aquellos que lo apuntalan en el Kremlin: «Serán todos llevados ante la Justicia y ese día llegará pronto».
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Un Navalni bromista y sonriente compareció ante los tribunales apenas 24 horas antes de morir
ReutersEl líder de la oposición rusa encarcelado ha muerto este viernes, según los servicios penitenciarios del país
El dedo acusador de Navalnaya fue levantado también por la mayoría de los presentes. Los más rápidos fueron los representantes de los gobiernos bálticos. El presidente de Estonia, Edgars Rinkevics, lamentó que el líder de la oposición rusa hubiera fallecido y arrojó el peso de la culpa «sobre la conciencia rusa». «Alexéi Navalni, como político, simplemente fue brutalizado por el Kremlin. Y ahora ha sido asesinado», dijo. «Ese es un hecho que muestra la verdadera naturaleza del actual régimen ruso». También el presidente lituano, Gitanas Nauseda, exigió «consecuencias para los responsables, que tienen que ser llevados ante los tribunales».
A estas declaraciones se fueron sumando las de los responsables de los gobiernos europeos, de la UE y de la OTAN. Y al frente de todas ellas las palabras de la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris. «Si se confirma, esta sería una nueva señal de la brutalidad de Putin», dijo, tras expresar su pesar a la mujer y los hijos de Navalni. «Pero cualquiera que sea la historia que nos cuenten desde Moscú, dejémoslo claro desde ahora mismo: Rusia es responsable».
«Rebajar ahora el apoyo occidental a Ucrania sería un gran regalo para Putin», señaló Harris en el que era el principal objetivo de su presencia en Múnich: diferenciar el trato que la administración Biden desea seguir propinando a Rusia del que está dispuesto a obsequiar Donald Trump si regresa a la Casa Blanca. Harris dedicó el resto de su discurso a advertir sobre los peligros de un creciente autoritarismo y aislacionismo, a repudiar la visión del mundo de Trump y a recordar la amenaza de que Estados Unidos pueda incumplir las garantías de seguridad para los aliados de la OTAN si vuelve a ocupar la presidencia.
Apoyo a la democracia
En su intervención, expuso una amplia defensa del enfoque de la administración Biden ante los desafíos globales, especialmente su disposición a seguir liderando el apoyo internacional a Ucrania. En medio de una atmósfera de profunda angustia en la Conferencia, tan marcada por la muerte en prisión de Navalni como por las palabras de Trump sobre dejar vía libre a Putin en Europa, Harris aseguró que EE.UU. no daría marcha atrás en su apoyo a la democracia y el multilateralismo, así como en la defensa de reglas y normas internacionales y contra los intentos de subvertirlos con un gobierno demócrata. «Estamos comprometidos en buscar un compromiso global, defender las reglas y normas internacionales, en defender a los aliados democráticos en el país y en el extranjero y en trabajar con nuestros aliados y socios en la búsqueda de objetivos compartidos», garantizó Harris.
«Sin embargo, hay algunos en Estados Unidos que no están de acuerdo y sugieren que lo mejor es aislarnos del mundo, burlar los entendimientos comunes, abrazar a los dictadores y adoptar tácticas represivas, incluso abandonar los compromisos con nuestros aliados a favor de la acción unilateral», continuó. «Permítanme ser clara: esa visión del mundo es peligrosa, desestabilizadora y, de hecho, miope», dijo Harris sin mencionar a Trump.
«Esa visión debilitaría a Estados Unidos y socavaría la estabilidad global. Por lo tanto, el presidente Biden y yo rechazamos tajantemente esa visión». Anteriormente, el jefe de la ONU, Antonio Guterres, había hecho una evaluación cruda y sombría del estado actual del mundo, lamentando no sólo la guerra en Ucrania sino también la situación actual en Gaza. «Está claro que nuestro mundo está en graves problemas», dijo Guterres. «La gobernanza global en su forma actual está afianzando las divisiones y alimentando el descontento».
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