Trump amenaza con detener al gobernador de California
Dice que los manifestantes en Los Ángeles sin insurrectos, que merecen estar en prisión
Trump militariza Los Ángeles sin permiso de California y desata una crisis institucional

El presidente de Estados Unidos ha amenazado con arrestar al gobernador de California, Gavin Newsom, por oponerse al despliegue de la Guardia Nacional durante las protestas contra las redadas migratorias en Los Ángeles.
Al ser consultado por la prensa tras regresar de Camp David, ... Trump dijo: «Yo lo haría».
La tensión comenzó días antes, cuando el llamado «zar fronterizo» de Trump, Tom Homan, advirtió que cualquier funcionario que obstaculice operativos migratorios podría ser detenido, incluyendo a Newsom y a la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass.
Newsom respondió con ironía en una entrevista con MSNBC: «Tom, arréstame. Vamos». También aclaró que, en una llamada reciente con Trump, el presidente nunca mencionó la posibilidad de arrestarlo.
Trump no se contuvo. «Yo lo haría si fuera Tom. Me parece perfecto. A Gavin le encanta la publicidad… Ha hecho un trabajo terrible. Me cae bien, es un tipo simpático, pero es tremendamente incompetente, todo el mundo lo sabe», dijo el presidente al ser preguntado sobre la posibilidad de arrestar al gobernador de California.
Cuando le preguntaron si los disturbios en Los Ángeles eran provocados por personas que ICE intenta deportar o por agitadores profesionales, Trump no dudó: «Los que están causando problemas son agitadores profesionales, son insurrectos. Gente mala. Deberían estar en la cárcel».
Bass, por su parte, calificó la amenaza de innecesaria y aseguró que no busca enfrentarse con el gobierno federal, aunque rechaza el envío de tropas federales a su ciudad.
Pese al tono agresivo de Trump y Homan, fuentes de la Casa Blanca dijeron después a los medios que no existen planes reales de arrestar a Newsom o Bass, y que todo responde más a una advertencia política que a una acción inminente.
En paralelo, Newsom envió una carta al secretario de Defensa pidiendo que las tropas sean devueltas al control estatal, argumentando que las autoridades locales son las más adecuadas para manejar las protestas.
Este nuevo enfrentamiento recuerda el polémico arresto reciente del alcalde de Newark y otros funcionarios demócratas durante redadas migratorias, y marca otro episodio de confrontación directa entre los estados progresistas y la Casa Blanca bajo el segundo mandato de Trump.
Trump ha movilizado a las tropas acusando a los manifestantes de agitadores a sueldo, tumultuarios profesionales que se dedican a provocar caos y vandalizar inmuebles públicos.
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