Tragedia en la isla italiana de Ischia: dos muertos y al menos 12 desaparecidos por un corrimiento de tierra

Un río de lodo y escombros golpeó Casamicciola (7600 habitantes), municipio de Ischia, al amanecer de este sábado. Es incierto todavía el número de víctimas. El vicepresidente y ministro de Transportes, Matteo Salvini, afirmó poco después de la tragedia que había «ocho muertos confirmados». Después, el alcalde de Nápoles, Gaetano Manfredi, manifestó que «por el momento hay noticias de una víctima y todavía hay una docena de desaparecidos».

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La situación es muy complicada aseguró el ministro del Interior, Matteo Piantedosi: «La personas desaparecidas probablemente están bajo el lodo y no responden a las llamadas». Un matrimonio, con un recién nacido, que se les dio por desaparecidos inicialmente, han sido encontrados e ingresados en un hospital.

Los daños son enormes. Hay unas 30 familias aisladas, en total un centenar de personas, sin agua ni luz, y es grande el riesgo de derrumbe de varias casas. El camino que lleva a sus viviendas está actualmente intransitable debido al lodo. El corrimiento de tierras se inició con las primeras luces del alba, partiendo de las laderas del monte Epomeo hasta invadir parte del municipio de Casamicciola, llegando al paseo marítimo. Algunos automóviles fueron arrastrados al mar. El alcalde ha pedido a los vecinos que no salgan de sus casas. Se ha dispuesto la evacuación de unas doscientas personas.

Las condiciones climáticas adversas hacen que las operaciones de rescate sean aún más complejas. El ministro de Defensa, Guido Crosetto, ha anunciado el apoyo de las Fuerzas Armadas a las tareas de rescate.

Para la isla de Ischia no hay paz. El de hoy es el enésimo evento dramático en la espléndida isla del Golfo de Nápoles, una tierra geológicamente frágil. Desde hace más de 100 años se producen deslizamientos de tierra, que causan destrucción y muerte. Las causas de la tragedia no solo están en las ocasionales malas condiciones climáticas, sino también la actividad ilegal, con construcciones no autorizadas, y la inestabilidad hidrogeológica, una causas ciertas y que todos conocen, pero que nadie resuelve.

A este respecto, el geólogo y climatólogo Massimiliano Fazzini explica: «El riesgo específico derivado de la crisis antropoclimática, como prefiero llamarlo, se ha convertido a ojos de todos en una emergencia absoluta. Si por un lado esperamos que este año sea estadísticamente excepcional en toda su evidencia climática, por otro no se puede confiar en el destino con la esperanza de que los años venideros no se caractericen por fenómenos atmosféricos extremos».

De ahí que el geólogo Fazzini, al igual que otros expertos vienen haciendo desde hace tiempo, reitera un dramático llamamiento al Gobierno para que se adopten medidas urgentes: «Desde el mes de julio hasta hoy, la inestabilidad hidrogeológica que ahora caracteriza todos los ambientes morfoclimáticos de la península, se ha cobrado cuarenta víctimas. Ya no podemos pensar en continuar en esta ruta dramática en la que se suceden situaciones desoladoras».