El Supremo de EE.UU. tiene la llave del futuro político de Trump
La Corte federal debe pronunciarse sobre la inhabilitación del expresidente antes del 5 de enero
El varapalo judicial a Trump demuestra la independencia del nuevo Tribunal Supremo
El fiscal que investiga a Trump pide al Supremo decidir sobre su inmunidad presidencial
Donald Trump en un acto de campaña en Waterloo (Iowa)
La Corte Suprema de Colorado ha declarado que, por haber incitado una insurrección en 2021 para perpetuarse en el poder, Donald Trump no puede volver a presentarse a primarias o elecciones en ese estado, alegando que vulneró una de las enmiendas de la ... Constitución.
Esa enmienda, la número 13, ha sido empleada por numerosos opositores del expresidente para tratar de impedir que se vuelva a presentar a las elecciones. Denuncias similares fracasaron o se empantanaron en estados como Michigan o Minnesota, aunque ahora han dado frutos en Colorado.
Este estado ofrece 10 de los 270 votos del colegio electoral que un candidato necesita para ser declarado ganador de la presidencia. Es una mínima fracción en un estado en el cual los demócratas llevan ganando 20 años. Pero lo importante es que la campaña de Trump ha presentado recurso y, ahora, deberá pronunciarse el Tribunal Supremo aquí en Washington, algo que puede tener unas consecuencias insólitas sobre la carrera presidencial.
Desde que en las elecciones de 2000 el Supremo declarara a George W. Bush ganador en las elecciones de Florida y, por tanto, presidente, el poder judicial no había tenido tanta influencia en una contienda política. A tres de los nueve jueces los ha nombrado Trump, y son parte de una sólida mayoría conservadora que recientemente, por ejemplo, invalidó el aborto hasta la viabilidad del feto.
Sin unanimidad
El fallo en Colorado, muy polémico, no fue en absoluto unánime. Cuatro jueces fallaron a favor y tres en contra. Los magistrados invalidaron la decisión de una jueza que dijo que sí, que Trump participó en una insurrección, pero que no puede ser inhabilitado.
Inmediatamente la campaña del expresidente presentó a este como una víctima. Sus portavoces difundieron mensajes en redes sociales trazando paralelismos con regímenes dictatoriales como el de Venezuela, en los que el poder impide a los opositores presentarse a elecciones. Una portavoz de Trump, Alina Habba, dijo en un comunicado el martes por la noche: «Esta decisión ataca el corazón mismo de la democracia de esta nación. No prevalecerá, y confiamos en que la Corte Suprema revocará esta orden inconstitucional».
El fallo de la Corte Suprema de Colorado es relevante por la forma en que establece los hechos ocurridos en enero de 2021, después de que Trump se negara a aceptar el resultado de las elecciones, alegando fraude por parte del candidato opositor. Primero, establece que el saqueo del Capitolio del 6 de enero de 2021 fue una insurrección. Es decir, afirma que Trump «participó» en una insurrección. El discurso de Trump «incitando a la multitud» antes del saqueo «no está protegido por la Primera Enmienda», la que garantiza la libertad de expresión. Los jueces creen que la ley de Colorado permite a los votantes impugnar la elegibilidad de Trump bajo la cláusula de insurreccionista.
En cuanto a plazos, la corte suspendió su decisión hasta el 4 de enero, o hasta que el Supremo federal de EE.UU. se pronuncie sobre el caso. El 5 de enero es la fecha límite para imprimir las papeletas de las primarias presidenciales del estado, que tienen lugar en marzo. Las primeras votaciones se darán el 15 de enero. Trump goza de una muy cómoda ventaja en todos los sondeos.
Los jueces de Colorado creen que Trump incitó una insurrección y que promovió en 2021 el saqueo del Capitolio
Esa realidad política llevó a los jueces de Colorado a escribir sobre su decisión: «No llegamos a estas conclusiones a la ligera. Somos conscientes de la magnitud e importancia de las preguntas que ahora tenemos ante nosotros. También somos conscientes de nuestro solemne deber de aplicar la ley, sin miedo ni favoritismo, y sin dejarnos influenciar por la reacción pública a las decisiones que la ley nos obliga a tomar».
Si Trump fuera descalificado, los sondeos de opinión e intención de voto colocan como más apreciados al gobernador de Florida, Ron DeSantis, y la ex gobernadora de Carolina del Sur y ex embajadora ante Naciones Unidas Nikki Haley. Dependiendo de las encuestas, ambos tienen serias opciones de imponerse a Biden. Entre Trump y Biden, el resultado estaría más reñido, según la media de sondeos que efectúa el sitio web Real Clear Politics.
El Partido Republicano apoya a Trump, y su presidenta. Ronna McDaniel, calificó el fallo de «injerencias en el sistema electoral».