La silla del primer ministro de Italia quema: un gobierno nuevo cada 13 meses

Para ponerlo en contexto, desde 1994, España ha tenido cinco presidentes (Felipe González, Jose María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero, Mariano Rajoy y Pedro Sánchez), Francia otros cinco, y Alemania, cuatro cancilleres. Italia, por su parte, ha tenido 10 presidentes en 16 gobiernos distintos. El motivo es la gran fragmentación del Parlamento, que no cuenta con ningún partido con una mayoría clara. Eso provoca inestabilidad política, y que cualquier conflicto haga que los Gobiernos se tambaleen.

70 ejecutivos diferentes en los últimos 76 años significa que, de media, Italia tenga un Gobierno nuevo cada 13 meses. Mario Draghi, última víctima que se ha cobrado la política italiana, fue investido el 13 de febrero de 2021 tras el colapso de la anterior coalición de Gobierno por disputas sobre el uso de fondos de la Unión Europea para recuperarse de la crisis generada por la pandemia, y con el objetivo de estabilizar el Parlamento. Sin embargo, la silla de Primer Ministro italiano ha vuelto a demostrar que quema y, después de 18 meses en el cargo, se ha visto obligado a dimitir.

Alcide de Gasperi tiene el honor de ser el primer ministro que más tiempo consecutivo ha pasado en el cargo. Al final de la Segunda Guerra Mundial, De Gasperi se convierte en líder incontestable de la democracia cristiana. De 1946 a 1953, dirige ocho gobiernos sucesivos. A su vez, es ministro de Asuntos Exteriores italiano. Durante su mandato, adhiere a Italia a la OTAN, la integra en la CECA y firma el Acuerdo De Gasperi-Gruber. 7 años al frente del ejecutivo que se quedan muy lejos de los 16 años consecutivos que se mantuvieron en el cargo los cancilleres Helmut Kohl y Angela Merkel, respectivamente, en Alemania.

Silvio Berlusconi es, de los 44 primeros ministros distintos que ha tenido Italia, el que más años ha ocupado el cargo. A diferencia de De Gasperi, este gobernó en tres etapas distintas, 1994-1995, 2001-2006 y 2008-2011. 9 años que, sin embargo, estuvieron marcados por sus escándalos políticos y por su vida privada, que tampoco permitió a Italia contar con una estabilidad política clara.

La dimisión de Mario Draghi llega en un momento muy delicado para la Unión Europea. Sumada a la marcha de Boris Johnson en Reino Unido, supone un duro golpe para Europa, que se encuentra en una situación de debilidad por la Guerra de Ucrania y las consecuencias que conlleva. Italia y Reino Unido son dos potencias muy importantes para combatir a Rusia y el resto de amenazas a las que Europa se va a enfrentar en los próximos meses.