Los países nórdicos dan un portazo a Scholz en su pretensión de comprarles gas
Suecia confía en el uso a largo plazo de la energía nuclear y descarta construir nuevas centrales eléctricas
Corresponsal en Berlín
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Iniciar sesiónEn su primera visita a Suecia, el canciller alemán ha intentado estrechar los lazos de cooperación energética, que según el gobierno de Estocolmo no dan mucho más de sí. Olaf Scholz ha demandado durante su visita que la UE permanezca fiel a los ... principios de la «solidaridad energética». Considera que la UE solo superará la crisis inminente «juntos y solidarios». «Es absolutamente necesario que trabajemos juntos», ha subrayado tras su reunión con la primera ministra sueca, Magdalena Andersson, a la que ha recordado que Alemania está produciendo actualmente la electricidad que se necesita con urgencia para los países vecinos de la UE a través de la generación de energía a base de gas. Scholz ha prometido continuidad y ha dado una clara señal de que Berlín espera ayuda de sus vecinos europeos en caso de que escaseen los suministros de gas.
Con su llamamiento, Scholz sigue claramente la línea de la Comisión de la UE, que solicita que los países miembros se apoyen mutuamente en caso de cuellos de botella en el suministro. Pero no todos los países de la UE se ajustan a estos objetivos. La principal resistencia viene de Portugal, España y Polonia. El hecho de que Alemania esté insistiendo tan claramente en el llamado «plan de emergencia del gas» de la Comisión se debe principalmente a su propia dependencia del gas ruso. En este contexto, Suecia ha reiterado su compromiso con la solidaridad europea, pero también ha advertido que no está en condiciones de aumentar más los envíos de gas a Alemania.
El gobierno de Suecia planea una prolongación de las plantas de energía nuclear, una opción que Alemania también está considerando para asegurar su propio suministro de energía. Andersson ha sugerido que este camino sería deseable, a pesar de las reticencias de Los Verdes, socios de gobierno de Scholz en la «coalición semáforo». Mientras que Scholz se ha avenido a que los reactores alemanes se sometan inicialmente a una prueba de esfuerzo para examinar hasta qué punto deben y pueden permanecer en línea por más tiempo, el Gobierno de Suecia ya está dando un paso más. En sus propias palabras, Andersson «confía en el uso a largo plazo de la energía nuclear», aunque también ha reconocido que «no se construirán nuevas centrales eléctricas en Suecia».
Alemania quiere impulsar un gasoducto por Portugal y España para combatir la dependencia del gas ruso
Rosalía SánchezEl canciller apunta que ha tratado el asunto con sus colegas de España, Francia y Portugal, así como con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, para estudiar las posibilidades de impulsar ese proyecto
Una cooperación más estrecha
Desde el comienzo de la guerra de agresión rusa en Ucrania, Alemania ha aumentado significativamente sus importaciones de gas de Noruega, que actualmente cubren alrededor del 30% de las necesidades energéticas del país. En el futuro, Alemania quiere cooperar aún más estrechamente con Noruega, especialmente en el campo de las energías renovables, como también acaba de anunciar Scholz en Oslo. El primer ministro noruego, Jonas Gahr Store, también aseguró a Alemania que seguirá siendo un proveedor «estable», pero enfatizó igualmente que las exportaciones máximas posibles a Alemania ya habían alcanzado sus límites en la reunión a la que asistió Scholz en lunes, junto con Noruega, Suecia, Finlandia, Dinamarca e Islandia, antes de continuar hacia Estocolmo.
Además de la cuestión del gas, Scholz ha prometido más envíos de armas para Ucrania, sin citar ningún plan concreto para posibles entregas de armas adicionales. Andersson simplemente advirtió una vez más que Rusia no debe ganar esta guerra. «Mientras dure la guerra, debemos permanecer firmes», ha repetido. Scholz por lo demás ha dejado claro que espera que Suecia pueda unirse pronto a la OTAN, a pesar de que siete de los 30 países miembros aún no han ratificado la admisión. El canciller instó a los gobiernos que todavía no lo han hecho a dar su consentimiento lo antes posible, sobre todo a Turquía, que abandonó su resistencia a cambio de un memorándum firmado con Suecia y Finlandia que incluye la demanda de Estambul de que los países extraditen a varias personas perseguidas. El Gobierno turco habla principalmente de «sospechosos de terrorismo». La semana pasada, el gobierno sueco aprobó la primera extradición de un hombre de 35 años que había sido condenado por fraude múltiple con tarjetas de crédito en Turquía y que se enfrenta 14 años de prisión. La decisión de Suecia causó indignación, especialmente en la población kurda, que no considera probada la conexión entre el hombre y las organizaciones terroristas sospechosas. Scholz ha sugerido a Estambul que cumpla con lo prometido y ha valorado muy favorablemente los pasos dados por los gobiernos de Suecia y Finlandia.
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