Rusia advierte que el ataque de Kiev con armas de Occidente a Rusia podría tener «consecuencias fatales»
El viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, aseguró que «subestiman la gravedad de la respuesta que pueden recibir» de Moscú
Putin amenaza a Occidente con una guerra nuclear si envía tropas a Ucrania
Putin amenaza a los «países pequeños» que ayudan a Ucrania: «Deben tomar conciencia de con qué están jugando»
Las autoridades ucranianas anunciaron este martes haber llevado a cabo los primeros ataques contra objetivos ubicados en Rusia haciendo uso de las armas proporcionadas a las tropas del país por sus aliados occidentales. Lo ha dicho la viceprimera ministra y encargada de la ... cartera de Reintegración de Territorios Temporalmente Ocupados, Irina Vereshuk, a través de su cuenta de Telegram, señalando que, pese a que el permiso obtenido de Occidente incluye «limitaciones», el Ejército ucraniano «ha destruido una lanzadera rusa de misiles antiaéreos S-300 en territorio ruso».
Vereshuk publica también una foto en donde se ve en llamas ese supuesto artefacto, asegurando que «arde bien». Y añade que tal acción ofensiva se produce «en los primeros días después de que Ucrania recibiera autorización para atacar territorio enemigo con armas occidentales».
Este lunes, otros canales de Telegram publicaron también fotografías de sistemas de misiles antiaéreos S-300 destruidos, que supuestamente fueron tomadas en la región de Bélgorod después de un ataque ucraniano utilizando cohetes estadounidenses disparados desde lanzaderas Himars. No se especifica cuándo se tomaron las imágenes. El lugar del impacto fue geolocalizado como una zona cerca del pueblo de Kisiliovo, a 18 kilómetros al norte de la ciudad de Bélgorod.
La batalla entre Járkov y Kupiansk
La potencial caída de la segunda ciudad de Kiev, en su momento, supondría un golpe brutal contra las pretensiones de Kiev de seguir alargando la guerra
La semana pasada, pese a la controversia generada en el seno de la OTAN, se informó de que el presidente norteamericano, Joe Biden, había concedido permiso a Ucrania para atacar territorio ruso con armas suministradas por Estados Unidos cuando se trate de derribar misiles disparados contra Járkov, detener el avance ruso en ese sector del frente o atacar bombarderos rusos que lancen bombas contra territorio ucraniano.
Amenaza nuclear
El viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, advirtió que tal medida de Washington puede llegar a acarrear «consecuencias fatales». En alusión a los dirigentes estadounidenses, Riabkov aseguró que «subestiman la gravedad de la respuesta que pueden recibir» de Rusia y aconsejó tomarse todo esto «lo más en serio posible». A finales de mayo, el presidente ruso, Vladímir Putin, insinuando de nuevo un ataque nuclear, alertó de que «los representantes de los países de la OTAN, especialmente en Europa deberían ser conscientes de con qué están jugando, si no con fuego. Deben recordar que, por regla general, se trata de estados con un territorio pequeño y una gran densidad de población. Y este es un factor que deberían tener en cuenta antes de hablar de lanzar ataques en territorio ruso».
No obstante, pese a las amenazas, son ya doce los países de la Alianza que ha autorizado a Kiev a emplear sus armas contra objetivos en territorio ruso: EE.UU., Francia, el Reino Unido, Holanda, Alemania, muy reacia en un principio, Polonia, República Checa, Suecia, Finlandia, Letonia, Estonia y Lituania. La mayor parte de ellos sin limitaciones.
No obstante, pese a las amenazas, son ya doce los países de la Alianza que ha autorizado a Kiev a emplear sus armas contra objetivos en territorio ruso
El pasado viernes, la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, aseguró que el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, reconoció que «el Reino Unido suministra misiles de crucero Storm Shadow desde hace mucho tiempo sin ninguna restricción y que varios países de la Alianza nunca han limitado el uso de sus armas en territorio ruso». «Exactamente de lo que Rusia ha estado hablando todo este tiempo. Era obvio que la OTAN estaba mintiendo y levantando una cortina de humo, inventando una historia sobre que supuestamente aún no habían decidido si permitirían o no que el régimen de Kiev lanzara ataques con armas occidentales contra territorio ruso».
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