Rumanía celebra unas elecciones marcadas por la polarización y la guerra en Ucrania

Las elecciones presidenciales de hoy tienen 13 candidatos y se espera que haya una segunda vuelta el 8 de diciembre. El 1 de diciembre también se celebrarán elecciones parlamentarias en las que se decidirá qué partido o partidos dirigirán el gobierno de Rumania durante los próximos cuatro años.

Rumanía, un país donde los escándalos por corrupción han sido muchos y muy sonados, es considerado un aliado de la OTAN en Europa del Este y un país que ha respetado en gran medida las normas de la UE en la región. Esa buena prensa de la que goza en la Alianza y en Bruselas lo distingue de países vecinos como Hungría, Bulgaria y Eslovaquia, que en los últimos años han despertado temores sobre el Estado de derecho y han virado hacia posiciones más prorrusas.

Pero esa tendencia podría cambiar. Simion, durante su camapaña electoral, se ha comprometido a adoptar una postura más firme contra Bruselas y defender el interés nacional de Rumanía, incluso, dijo, si eso significara eludir la legislación de la Unión Europea. «Mentiría si dijera que respetaremos la legislación de la UE», afirmó. «Si mañana [hay] una nueva ley que no hemos votado… o leyes que no son buenas para Rumanía, intentaré utilizar todos mis poderes para detener lo que está perjudicando a mi pueblo».

Simion, tildado de «extremista» en su país y de «espía ruso», saltó a la fama en la pandemia con una plataforma antivacunas. En sus discursos, prometió permanecer leal a la OTAN y trabajar para reformar la UE desde dentro si es elegido. Esa es una táctica similar adoptada por Meloni después de su victoria electoral el año pasado.

El líder nacionalista rumano ha mostrado en varias ocasiones su admiración hacia Trump, la primera ministra italiana Giorgia Meloni y el líder de la extrema derecha polaca Jarosław Kaczynski. Esa admiración se ha visto por ejemplo, en la política que quiere llevar a cabo Simion en Ucrania (país al que tiene prohibido el acceso). En el papel, todos los candidatos presidenciales son pro-UE, pro-OTAN y apoyan a Ucrania frente a Rusia, tras la invasión a gran escala de Kiev por parte de Moscú. Sin embargo, Simion ha prometido suspender la ayuda militar a Kiev si es elegido y respaldar un acuerdo de paz negociado por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, incluso si eso significa que Kiev haga concesiones territoriales.

Independientemente de que Simion llegue o no a la segunda vuelta, su partido AUR va camino de obtener un buen resultado en las elecciones parlamentarias del 1 de diciembre, lo que hará difícil que cualquier coalición lo excluya.