El régimen cubano obliga a una presa política a abortar en contra de su voluntad

Este diario ha podido corroborar la información con la madre de la prisionera, Bárbara Isaac, quien explica que conoció la noticia a través de una llamada telefónica realizada por su otra hija, Lidiani. Ambas tienen 25 años y son trillizas. Dos de ellas están presas y se encuentran recluidas en la prisión de mujeres Guamajal, en la provincia cubana de Santa Clara, cumpliendo una condena de ocho años de privación de libertad por participar en las protestas antigubernamentales del 11 de julio de 2021 (11J).

«Ella nunca había podido quedarse embarazada y el bebé ha llegado justo en este momento. Ella lo desea, no quiere sacárselo (abortarlo)», ha declarado a ABC Bárbara Isaac. La madre también ha asegurado que su hija sufre mareos, pero le niegan asistencia médica. «Temo que la obliguen a abortar y le pase algo; temo por la vida de mi hija y de su bebé», ha añadido.

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Por su parte, Larrondo ha pedido solidaridad para salvar la vida del bebé. «Desde PD defendemos la vida de este bebé y culpamos al gobierno de Cuba de estar cometiendo un asesinato. Un aborto forzado, en contra de la voluntad de la madre y sin motivo clínico, no es sino un asesinato producto del terrorismo de Estado», sentenció.

En Cuba se legalizó el aborto en 1936 pero solo para casos de violación o en el supuesto de que el embarazo causara problemas de salud a la gestante. No fue hasta 1961 cuando se despenalizó -no está legalizado, pues no existe una norma al respecto- y, cuatro años más tarde, se comenzó a practicar dentro del Sistema Nacional de Salud y de manera gratuita. De esta forma, Cuba se convirtió así en el primer país del continente en despenalizar el aborto.

Las hermanas Rodríguez Isaac permanecen en prisión desde el 15 de julio de 2021. Fueron acusadas de «desacato», «desorden público» y «atentado» tras participar en las protestas del 11J; 8 meses más tarde fueron condenadas a 8 años de prisión.

En agosto de 2023 las autoridades cubanas les negaron determinadas mejores condiciones carcelarias como represalia por escribir una carta para conmemorar el segundo aniversario de su encierro y por negarse a pararse en firme cuando pasaban los directivos del penal. La madre de ambas ha expuesto en varias ocasiones el acoso y las torturas físicas y psicológicas a las que son sometidas por su rebeldía y denuncias constantes.

Ambas pertenecen a la Asociación de Yorubas Libres de Cuba (religión afrocubana). En septiembre de 2021 la Alianza Global por la Libertad (GLA por sus siglas en inglés) solicitó medidas cautelares a favor de cuatro miembros de la Asociación de Yorubas Libres de Cuba ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, incluidas las hermanas Rodríguez Isaac.

«Recientemente, Naciones Unidas ha defendido su causa en la carta acusatoria enviada por cuatro relatores especiales y el Grupo de Trabajo para la Detención Arbitraria. Los cuatro relatores y el grupo de trabajo de la ONU que defendieron la causa de Lisdany como perseguida Yoruba ya tienen mi nueva denuncia. A ver si saltan rápido y salvamos la vida del bebé», explicó Larrondo.

Según PD, Cuba cerró el 2023 con 1.063 presos políticos, la mayoría de ellos asociados a las protestas del 11J, manteniéndose la cifra récord por tercer año consecutivo. La ONG ha descrito el año pasado como año marcado por la «desesperanza para aquellos incautos que pensaban que el régimen de La Habana daría marcha atrás».

Además, criticó a la comunidad internacional con representación en La Habana, acusándola de tener acciones «tibias o nulas» en defensa de los derechos humanos. Y señaló a la Unión Europea, Canadá y Noruega, acusándolos de actuaciones «dignas de vergüenza para los europeos demócratas», mientras lamenta la insuficiencia de los esfuerzos del Vaticano.