Qatar ya plantea una negociación para liberar mujeres soldado

Barnea viajó a Doha por tercera vez desde el 7 de octubre y, según informaron medios israelíes, sus conversaciones se centran en garantizar la liberación de los veinte rehenes adicionales previstos en los dos días de extensión de la tregua, así como intentar ampliar la pausa temporal para recuperar a todas las mujeres y niños.

Mientras la diplomacia miraba a Doha, sobre el terreno ambos bandos se acusaron mutuamente de violar el alto el fuego. El Ejército acusó a Hamás de la detonación de tres artefactos explosivos cerca de soldados en dos incidentes en el norte de Gaza. Varios militares sufrieron heridas leves.

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Hamas respondió diciendo que hubo «fricción» en el terreno provocada por la «clara violación del acuerdo de alto el fuego por parte del enemigo», sin aportar más detalles. El portavoz de las Brigadas Al Qassam, Abu Obeida, insistió en que ellos respetan el acuerdo y pidió a los mediadores que presionen a Israel para que «respete todos los términos pactados en tierra y aire».

Pese a las acusaciones, ninguna de las partes dio por roto un compromiso que durante la noche tenía prevista una nueva liberación de diez rehenes a cambio de la excarcelación de treinta presos palestinos. El silencio en los cielos de Gaza sirvió también para la entrada de otros doscientos camiones con ayuda humanitaria y medicinas. A los responsables de la Franja les gustaría aumentar el número de camiones diarios a mil para poder hacer frente a las enormes necesidades de una población que ha sufrido un desplazamiento masivo y ahora vive hacinada en el sur de la Franja.

Corinne Fleischer, directora del Programa Mundial de Alimentos (PAM) para Oriente Medio, calificó la situación de «catastrófica» y dijo que es «muy probable que la población de Gaza, especialmente las mujeres y los niños, corran un alto riesgo de sufrir hambruna si el PMA no es capaz de proporcionar acceso continuo a los alimentos. Desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertaron de que «las enfermedades pueden causar más muertos que los bombardeos» en Gaza.

El objetivo de Qatar es «ampliar aún más el alto el fuego», declaró el portavoz del Ministerio de Exteriores, Majed Al-Ansari, pero todo dependerá de la capacidad de Hamás de juntar grupos de diez rehenes a diario, algo que los qataríes no pueden garantizar ya que los cautivos están dispersos en diferentes escondites de la Franja y algunos en manos de otras facciones militares, como la Yihad Islámica. Anoche, sin embargo, ambos grupos -Hamás y la Yihad- llegavaron a cabo de manera conjunta la entrega de rehenes a la Cruz Roja por vez primera: diez mujeres de entre 17 y 84 años.

En la primera fase del intercambio, la negociación se ha centrado en mujeres y niños junto a sus madres, pero en Doha ya se plantea un próximo escenario para discutir la liberación de mujeres soldado, reservistas y soldados regulares, así como la entrega de cadáveres. En acuerdos independientes al alcanzado con el Estado judío, Hamás también ha liberado a diecisiete rehenes tailandeses, gracias a la mediación de Irán; también, un filipino y un ruso, gracias a los contactos con Moscú.

Además de ser el mediador clave entre las dos partes, «Qatar está apoyando todos los esfuerzos regionales para lograr un alto el fuego permanente en Gaza», añadió Al Ansari, en referencia a las propuestas lanzadas en los últimos días desde países como Egipto sobre el día después a la guerra en Gaza. El presidente Al Sisi planteó la posibilidad de un futuro Estado palestino desmilitarizado y «bajo la supervisión temporal de seguridad internacional, ya sea de fuerzas de la OTAN, de Naciones Unidas o de países árabes».

Ambos bandos son conscientes de que esta pausa es un paréntesis en medio de la guerra y que el alto el fuego durará el tiempo que Hamás pueda ganar con la entrega de rehenes. El jefe del Ejército, Herzi Halevi, dejó claro al enemigo que «estamos listos para seguir luchando hoy mismo. Estamos utilizando los días de tregua como parte del acuerdo para aprender, fortalecer la preparación y preparar los planes operativos (…) Nos preparamos para seguir luchando y desmantelar a Hamás».