Las protestas contra las redadas antiinmigración se extienden por EE.UU.: Texas desplegará la Guardia Nacional

El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, anunció el martes por la noche que desplegará la Guardia Nacional, que «utilizará todas las herramientas y estrategias para ayudar a las fuerzas del orden a mantener el orden». «La Guardia Nacional de Texas se desplegará en todo el estado para garantizar la paz y el orden. Protestar pacíficamente es legal. Dañar a una persona o propiedad es ilegal y conllevará arresto», publicó Abbott en X.

El lunes, manifestantes y policías en Austin (Texas) se enfrentaron. Se espera que organizaciones del sur de Texas realicen manifestaciones contra el ICE este miércoles y este sábado, según ha informado CNN a medios locales.

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Javier Ansorena

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También se han producido protestas en otras ciudades, como Nueva York, Atlanta y Chicago, donde los manifestantes gritaron y forcejearon con los agentes. Algunos manifestantes se subieron a la escultura de Picasso en la Plaza Daley, mientras que otros corearon que se debería abolir el ICE.

Las extraordinarias medidas de Trump, que consistían en enviar a la Guardia Nacional y a la Infantería de Marina para sofocar las protestas en Los Ángeles, han provocado un debate nacional sobre el uso de las fuerzas armadas en territorio estadounidense y han enfrentado al presidente republicano con el gobernador demócrata de California.

«Este descarado abuso de poder por parte de un presidente en funciones avivó una situación explosiva, poniendo en riesgo a nuestra gente, a nuestros oficiales e incluso a nuestra Guardia Nacional. Fue entonces cuando comenzó la espiral descendente», declaró el gobernador de California, Gavin Newsom, en un discurso por vídeo este martes. «Una vez más, optó por la escalada. Optó por más fuerza. Optó por el teatro en lugar de la seguridad pública... La democracia está bajo ataque». Newsom, considerado ampliamente como un candidato presidencial para 2028, y el estado de California demandaron a Trump y al Departamento de Defensa el lunes, buscando bloquear el despliegue de tropas federales. Trump, a su vez, sugirió que Newsom debería ser arrestado.

Los líderes demócratas han expresado su preocupación por la crisis nacional en lo que se ha convertido en el punto álgido más intenso hasta la fecha en los esfuerzos de la Administración Trump por deportar a los migrantes que viven en el país sin documentos y luego reprimir a los opositores que salen a las calles a protestar.

Cientos de marines estadounidenses llegaron al área de Los Ángeles el martes bajo las órdenes de Trump, quien también ordenó el despliegue de 4.000 efectivos de la Guardia Nacional en la ciudad californiana. Los marines y la Guardia Nacional se utilizarán para proteger al personal y los edificios gubernamentales, y no en acciones policiales.

Trump, quien fue reelegido el año pasado principalmente por su promesa de deportar a los inmigrantes indocumentados, utilizó un discurso en honor a los soldados este martes para defender su decisión. Declaró a las tropas en la base militar de Fort Bragg (Carolina del Norte): «Generaciones de héroes del Ejército no derramaron su sangre en costas lejanas solo para ver cómo nuestro país era destruido por la invasión y la anarquía del tercer mundo».

«Lo que están presenciando en California es un ataque en toda regla a la paz, al orden público y a la soberanía nacional, perpetrado por alborotadores que portan banderas extranjeras», dijo Trump, añadiendo que su Administración «liberaría Los Ángeles». Los manifestantes ondearon banderas de México y otros países en solidaridad con los migrantes detenidos en una serie de redadas cada vez más intensas.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó el lunes que su división del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) había arrestado a 2,000 infractores migratorios al día recientemente, una cifra muy superior al promedio diario de 311 del año fiscal 2024, bajo la presidencia de Joe Biden.

El fiscal general de California, Rob Bonta, declaró a Reuters que al estado le preocupaba permitir que las tropas federales protegieran al personal, ya que existía el riesgo de que esto violara una ley de 1878 que generalmente prohíbe a las fuerzas armadas estadounidenses, incluida la Guardia Nacional, participar en la aplicación de la ley civil. «Proteger al personal probablemente signifique acompañar a los agentes del ICE a las comunidades y vecindarios, y proteger las funciones podría significar proteger la función del ICE de hacer cumplir la ley de inmigración», dijo Bonta.

El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE.UU. publicó el martes fotos en X de tropas de la Guardia Nacional acompañando a oficiales de ICE en una redada migratoria. Funcionarios de la Administración Trump han prometido redoblar las redadas migratorias en respuesta a las protestas callejeras. La última vez que se utilizó al Ejército para una acción policial directa bajo la Ley de Insurrección fue en 1992, cuando el entonces gobernador de California solicitó al presidente George H.W. Bush ayuda para responder a los disturbios de Los Ángeles por la absolución de los policías que golpearon al automovilista negro Rodney King.