Perú no romperá con México ni Colombia a pesar de su injerencia en la crisis política

Ayer, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, escribió en su cuenta de Twitter que el artículo 23 de la convención americana establece como derecho político elegir y ser elegido. «Para quitar este derecho se necesita sentencia de juez penal. Tenemos un presidente (Pedro Castillo) en Suramérica elegido popularmente sin poder ejercer su cargo y detenido sin sentencia de juez penal», señaló el mandatario colombiano, que añadió: «La violación de la convención americana de DD.HH. es manifiesta en el Perú. No puedo pedirle al Gobierno venezolano que reingrese al sistema interamericano de DDHH y al mismo tiempo aplaudir que dicho sistema se viole en el Perú».

Sobre el desconocimiento oficial del Gobierno mexicano a su gobierno, en opinión de Boluarte eso «no es el sentir del pueblo mexicano respecto a Perú».

A pesar de lo s constantes cuestionamientos del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, al cambio de gobierno y al nombramiento de la nueva presidenta, insistió en que «seguimos manteniendo las relaciones diplomáticas con México. Efectivamente hemos pedido la expulsión del embajador de México en Perú después de las declaraciones en su programa del presidente de México».

La jefa de Estado subrayó que trabajan «arduamente para poder restituir» a los embajadores de Perú en México, Colombia, Bolivia y Argentina para que puedan «regresar a las embajadas respectivas, porque es muy importante para la región, seguir trabajando en la Alianza del Pacífico».

En el juego regional de izquierdas latinoamericano de apoyo a Pedro Castillo se han desmarcado hasta el momento el presidente de Chile, Gabriel Boric y el presidente electo de Brasil, Luis Inazio Lula da Silva.

Sobre el reinicio de las protestas en el sur del país que se realizará a partir del 4 de enero, la mandataria señaló que no se dice la verdad sobre ella y que quienes esparcen las mentiras son «los que lideran las movilizaciones cargadas de violencia».

Sobre esas mentiras, la mas frecuente es que ella dirigió un golpe de Estado contra Castillo: «Dina no ha movido una sola pestaña para que suceda lo que le ha sucedido al expresidente Pedro Castillo…al contrario lo busqué e intenté sin éxito que tuviera una distinta mirada de cómo afrontar la crisis».

Por último, Boluarte anunció que se realizará un plan de reactivación económica de 300 millones de dólares en el sur del país y resaltó que no renunciará al cargo de presidenta: «¿Qué resolvería mi renuncia?. Regresará el desorden político, el Congreso tendría que hacer una elección en meses. Por eso asumo esta tarea. El 10 de enero próximo pediremos el voto de investidura al Congreso», zanjó Boluarte,