Orbán sufre un nuevo revés en la UE: el PiS polaco se unirá al grupo de Meloni

Contar con los veinte escaños del PiS no sólo suponía sumar un país, sino nada menos que veinte escaños, lo que habría facilitado el acceso a varios de los 14 vicepresidentes del Parlamento Europeo, además de un peso considerable en la Conferencia de Presidentes, en la que los líderes de cada uno de los grupos se reúnen bajo la presidencia del presidente y que se considera el verdadero centro de control del organismo europeo, puesto que determina la composición de las comisiones, el reglamento de la Cámara y numerosas cuestiones de agenda.

Fuentes de la sede del PiS en Varsovia señalan que la reciente visita de Orbán a Kiev y su petición al Gobierno ucraniano de un alto el fuego antes de la negociación de una paz aceptable para Zelenski han volcado la balanza en contra de asociarse con los Patriotas de Europa. El PiS, en la oposición desde las elecciones del año pasado, al igual que el gobierno de Donald Tusk, mantiene una firma posición de apoyo a Ucrania y prevención contra el expansionismo ruso, mientras que Orbçan no oculta su talante prorruso. Esta diferencia irreconciliable ha desaconsejado formar parte del mismo grupo parlamentario. El periódico oficialista húngaro Mandiner , sin embargo, atribuye la negativa a que los políticos del PiS «tienen miedo a un giro a la derecha».

Los nacionalistas polacos han preferido, en cambio, aceptar la oferta de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, de permanecer en su grupo de Conservadores y Reformistas Europeos (ECR). Las elecciones de la UE dieron como resultado que el ECR se convirta en el tercer mayor grupo del Parlamento Europeo, con el PiS y Fratelli d'Italia, de Meloni, como las dos formaciones nacionales principales. ECR habría perdido su tercera posición frente a Renew si esos 20 eurodiputados del PiS no hubiesen permanecido en el grupo y la debido hacer concesiones para conservarlos. Kosma Złotowski, miembro del PiS, ha adelantado su nombramiento como cosecretario del ECR. El puesto de secretario general de la ECR también recaerá en un eurodiputado polaco.

Otro partido conservador polaco que busca socios en el Parlamento Europeo es la Confederación, de extrema derecha, que ha ingresado en junio por primera vez a la cámara y tantea asociaciones. La eurodiputada de la Confederación Anna Bryłka está poniendo como condición no cooperar con Alternativa para Alemania (AfD), que actualmente no pertenece a ningún grupo, y ha sugerido que su partido está más interesado en unirse al ECR o al grupo de extrema derecha Identidad y Democracia, aunque es previsible ahora que Orbán puje con fuerza para ganar a la Confederación para sus «Patriotas por Europa».

En su estrategia europea, el PiS desea una adhesión completa a la OTAN y minar la influencia alemana en la UE. Su líder, Jaroslaw Kaczynski, acaba de criticar nuevamente al primer ministro Tusk, al que acusa de ser un «sirviente» del canciller alemán Olaf Scholz y de renunciar a las demandas históricas de reparación por los daños históricos causados por el Tercer Reich. «Se subordinó a los alemanes en todos los aspectos», ha juzgado las recientes consultas bilaterales entre los gobiernos, «si un político adopta una actitud de siervo hacia otro país, será tratado como tal».