Ofensiva de Trump y los republicanos contra Jack Smith, el fiscal que trató de llevarlo a juicio

Trump ha mantenido que Smith ha ejecutado una persecución política ordenada por los demócratas para evitar su regreso a la Casa Blanca -aunque esas causas fueron una de las razones que dispararon su apoyo popular - y que ahora debe responder por ello. En la recta final de la campaña prometió que despedirá a Smith en su primer día en la Casa Blanca y fue más allá: «Debería ser considerado un demente, habría que echarlo del país».

Los aliados republicanos de Trump en el Congreso y sus asesores cercanos ya están dando muestras de que irán a por Smith. El pasado viernes, dos diputados de alto rango, Jim Jordan y Barry Loudermilk, enviaron una carta a Smith exigiéndole que conserve todos los documentos. Es una señal clara de la investigación que los republicanos buscan impulsar de los procesos de Smith contra Trump.

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«Debería haber investigaciones», aseguró a 'The Washington Post' Mike Davis, un asesor de Trump. «En el comité judicial del Senado, en el comité judicial de la Camara de Representantes, en la Oficina de Responsabilidad Personal del Departamento de Justicia y una investigación penal», defendió. De momento, los republicanos tienen asegurada la mayoría en el Senado para la próxima configuración del Congreso, que arrancará a principios de enero, y están a punto de certificar que conservan su actual mayoría en la Cámara.

En una entrevista con un medio muy afín a Trump, 'Newsmax', Davis llegó a decir que Smith «debe ir a la cárcel por participar en una conspiración criminal contra el presidente Trump».

La gran adhesión al multimillonario neoyorquino en esta campaña, Elon Musk, también se sumó al coro de voces que exigen que se vaya a por Smith. «Los abusos de Jack Smith en el sistema judicial no pueden quedar impunes», escribió el hombre más rico del mundo en un mensaje en su red social, X.

La ofensiva contra el fiscal especial se produce en un momento en el que Smith empieza a dar pasos para poner fin a los procesos contra Trump. De las cuatro causas que afrontó el presidente electo, las dos de naturaleza federal fueron impulsadas por Smith y son las que tienen menos futuro. La práctica del Departamento de Justicia es que no se procesa a un presidente de EE.UU. en su cargo. Ante el resultado electoral del martes 5 de noviembre, Smith anunció que posponía el cumplimiento de plazos judiciales para estas causas, en una señal de que considera que acabarán en vía muerta.

En la única causa por la que Trump fue a juicio - falsificación de documentos financieros para ocultar una relación extramatrimonial con una actriz porno -, fue declarado culpable por un jurado popular de Nueva York. Se espera que el juez del caso tome este martes una primera decisión sobre la sentencia, que podría verse afectada por la decisión del Tribunal Supremo de este año que amplió el concepto de inmunidad presidencial.