Nikos Jardaliás, que reveló mapas secretos del Ejército griego, gana las elecciones regionales del Ática

A pesar de la gestión de los incendios forestales y de las inundaciones del pasado verano, el partido conservador Nueva Democracia, formación gobernante en Grecia, consiguió ganar en 7 de las 13 regiones del país en la primera vuelta de las elecciones. El próximo domingo se celebrará una segunda vuelta en las restantes regiones donde ninguno de los candidatos obtuvo el 43% de los votos necesarios para ser elegido, según establece la legislación helena.

La llegada de Jardaliás a la candidatura de la región del Ática tuvo como antesala varias polémicas acaecidas durante el pasado mes de julio, durante la gestión de los catastróficos incendios forestales que arrasaron con decenas de miles de hectáreas en todo el país. La primera de ellas, cuando el entonces ministro de Protección Civil, Notis Mitarakis, tuvo que presentar su dimisión tras faltar a una reunión de coordinación en el Centro de Gestión Crisis por encontrarse navegando en un yate por las islas del Egeo.

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Poco después, se hicieron públicos unos vídeos donde Yorgos Patulis, gobernador del Ática, bailaba animadamente un «zeibekiko», mientras la región vivía uno de los peores incendios de las últimas décadas. Ante la ola ola de críticas que provocó la difusión de los vídeos, el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, se vio obligado a tomar una decisión drástica: apoyar la candidatura de Jardaliás a las elecciones regionales de otoño y dejar a Patulis fuera de los comicios.

Sin embargo, tras su nombramiento como candidato a los comicios regionales de Grecia, Jardaliás cometió un grave error. Como viceministro de Defensa, y tras las duras críticas por la llegada de las llamas a la base militar de Anjialos, una de las instalaciones aéreas más importantes del país donde el Ejército heleno custodia armamento y parte de su flota de aviones F16, Jardaliás visitó varias de las instalaciones militares griegas para demostrar que todo estaba bajo control.

No obstante, su equipo de comunicación compartió en la web del ministerio una fotografía tomada durante esas visitas en las que aparecía Jardaliás contemplando unos mapas donde se podía leer en mayúsculas la palabra «Secreto».

La imagen, compartida sin pixelar, mostraba dos mapas confidenciales del Ejército griego en el que aparecían relevantes estructuras militares y almacenes de combustible del norte del país. Aunque la imagen fue retirada rápidamente de la web, la fotografía ya circulaba en las redes sociales y había sido publicada por varios medios de comunicación locales e internacionales. Un medio turco publicó la imagen sin ocultar las bases militares secretas que aparecían en el mapa y calificó la publicación como «torpeza» por parte del Ejecutivo griego.

No obstante, cuatro meses después de los comicios generales y a pesar de un difícil verano para el Ejecutivo de Mitsotakis, el marcador se ha vuelto a poner a cero y el partido conservador confirma el apoyo de los municipios y regiones. Por otro lado, el «efecto Kaselakis» no se ha notado en las urnas, y Syriza continúa perdiendo puestos, mientras que los socialistas del Pasok y los comunistas del KKE han logrado una moderada mejoría.