Nikki Haley dice que seguirá en las primarias republicanas aunque pierda en su propio estado

Esas especulaciones, en realidad, fueron un cebo con el que Haley buscó ganar protagonismo y tratar de recuperar la atención de los votantes. «Algunos de vosotros, quizá algunos de los de la prensa, habéis venido aquí para ver si me despedía de la carrera», dijo Haley en un discurso en el que, como es habitual en ella, no admitió preguntas. «Pues no, estoy muy lejos de ello. Y estoy aquí para deciros por qué: me presento a la presidencia porque tenemos que salvar al país».

Haley, que durante la mayor parte de la campaña no fue a por el expresidente, ha endurecido sus ataques contra Trump en las últimas semanas. «Se ha vuelto más inestable y más desatado. Se pasa más tiempo en los juzgados que haciendo campaña. No quiere debatir. Está distraído y todo gira alrededor de sí mismo. Está obsesionado con sus propios demonios del pasado», dijo.

La candidata hizo sangre con un asunto central de su mensaje: tener a Trump como candidato es un regalo para los demócratas y la única posibilidad que un candidato tan débil como Joe Biden consiga la reelección. Haley criticó a los líderes republicanos que saben eso, pero que no hacen nada para remediarlo por miedo a Trump, que tiene una base leal de seguidores a la que todos temen. «Los mismos políticos que apoyan a Trump de forma pública no lo quieren de forma privada», dijo. «Porque saben el desastre que ha sido y sigue siendo para nuestro partido. Tienen demasiado miedo de decirlo en alto», criticó en referencia a las derrotas electorales que han sufrido los republicanos desde que Trump llegó al poder en 2016. «Yo no tengo miedo de decir las verdades que duelen, no necesito besar el anillo y no tengo miedo de las represalias de Trump».

En lo que va de primarias, Haley no ha conseguido posicionarse como alternativa real ante un Trump que se disparó en las encuestas el año pasado por sus batallas judiciales. En Iowa, quedó tercera. En New Hampshire, un estado con un electorado que le favorece y donde concentró buena parte de sus esfuerzos, solo fue segunda, y a más de diez puntos de Trump. De Nevada, donde no se enfrentó de forma directa con Trump porque el expresidente se presentó en los 'caucu y ella en las primarias, salió humillada: la opción ganadora en las primarias no fue ella, sino 'ninguno de estos candidatos'. No parece que Haley vaya a cambiar la trayectoria en su propio estado, pero su intención es seguir en la carrera al menos hasta el 'Supermartes', el próximo 5 de marzo, cuando más de media docena de estados estarán en juego.

La candidata se emocionó al referirse a su marido, un militar que está desplegado en el extranjero, después de que Trump se mofara de su matrimonio en un reciente mitin. «¿Qué ha pasado con su marido? ¿Dónde está? ¡Se ha largado! Él lo sabía, él lo sabía», dijo el expresidente.