Netanyahu afirma que los Altos del Golán serán de Israel «por la eternidad» e Irán considera sus avances en la zona como «violación» de la ley

Israel capturó la mayor parte de la meseta montañosa de Siria durante la Guerra de los Seis Días de 1967 y la ha ocupado desde entonces, repeliendo un intento sirio de reconquista en la guerra árabe-israelí de 1973.

Netanyahu dijo que el control israelí del terreno elevado «garantiza nuestra seguridad y soberanía».

Durante el fin de semana, ordenó a las tropas que se trasladaran a una zona de amortiguamiento patrullada por la ONU y más allá, después de que los rebeldes liderados por islamistas derrocaran al presidente Bashar al-Assad en Siria.

Las Naciones Unidas y los vecinos de Israel denunciaron la medida, y un portavoz de la ONU dijo el lunes que las acciones de Israel eran «una violación» del acuerdo de retirada de 1974 entre Israel y Siria.

Netanyahu dijo el domingo que el colapso del gobierno de Assad y el abandono de sus puestos por parte del ejército sirio habían invalidado el acuerdo.

El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Gideon Saar, dijo el lunes que la toma de la zona de amortiguamiento fue «un paso limitado y temporal que tomamos por razones de seguridad».

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El portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Matthew Miller, expresó su comprensión por las acciones de Israel que, dijo, «no son permanentes» y «en última instancia, lo que queremos ver es una estabilidad duradera entre Israel y Siria, y eso significa que apoyamos a todas las partes que defienden el acuerdo de retirada de 1974».

Irán, por su parte, condenó como una «violación» del derecho internacional la incursión del ejército israelí en la zona de distensión del Golán, un área bajo control de la ONU alrededor de la parte anexionada por Israel de este territorio sirio.

«Esta agresión es una violación flagrante de la Carta de Naciones Unidas», dijo el portavoz de la diplomacia israelí, Esmail Baqai, en un comunicado publicado el lunes por la noche.