Meloni reúne a los líderes conservadores del mundo en Roma

Conocido como Atreyu -nombre del protagonista de la novela 'La historia interminable', escrita por Michael Ende-, y celebrado en el Castel Sant'Angelo de Roma, se ha convertido en una convención de debate político transversal, cada vez más importante y especialmente este año, con debates durante tres días donde han intervenido personalidades de relieve nacional e internacional.

Atreyu contó con la presencia de Elon Musk, dueño de Tesla y de la red social X (antes Twitter), admirado por los populistas y líder de la nueva derecha global, que desde el escenario, con uno de sus once hijos en brazos, se preocupó por la baja natalidad de los italianos y reclamó que hagan más hijos. Entre sus numerosos contactos, Musk se vio también con el líder de Vox, Santiago Abascal, quien le transmitió «la importancia de X para la libertad de expresión». Abascal fue una de los protagonistas en la clausura, con un discurso en el que denunció que sus palabras al periódico 'Clarín', en alusión a Pedro Sánchez, fueron manipuladas por la izquierda.

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Otra estrella internacional que participó en Atreyu fue el primer ministro británico, Rishi Sunak, que ha establecido una estrecha relación política con Meloni, en especial sobre las políticas de inmigración. Sunak llegó a afirmar que Meloni y él se estaban inspirando en Margaret Thatcher en su búsqueda de hacer «lo que sea necesario» para «detener los barcos» con inmigrantes irregulares.

La primera ministra italiana y Sunak acordaron un primer proyecto italo-británico de repatriaciones asistidas en los países de origen, preparado por la Organización Internacional para las Migraciones, a favor de refugiados bloqueados en Túnez.

De los 154.000 inmigrantes que llegaron desde el inicio de 2023 a las costas italianas, unos 100.000 partieron desde Túnez, desembarcando en su mayoría en la isla de Lampedusa. El primer ministro británico calificó de «insostenible e inmoral» esa situación en la isla. Sunak y Meloni, además, se entrevistaron también con el 'premier' albanés, Edi Rama, abordando la inmigración como tema de fondo.

El socialista Rama, participante también en Atreyu, prometió ayudar a Meloni con un pacto sobre inmigración, definiendo a la primera ministra como «una pragmática moderada; al fin y al cabo, es demócrata cristiana».