Meloni relanza los centros de deportación en Albania como «solución compartida con la UE»

La nave militar Libra ya está lista para realizar, en los próximos días, nuevos trayectos hacia Albania con inmigrantes irregulares rescatados en el Mediterráneo -salvo mujeres, niños y personas enfermas-, para ser luego repatriados a sus países de origen. Así, la líder de Hermanos de Italia convocó para la tarde del pasado lunes, en vísperas de la Nochebuena, una reunión a la que asistieron los ministros de Exteriores, Defensa, Interior y Asuntos Europeos. Y con solo un punto en el orden del día: cómo reiniciar, ya en enero, el funcionamiento de los controvertidos centros albaneses.

Tras la reunión, el vicepresidente Antonio Tajani, titular de Exteriores, aseguró el compromiso del gobierno italiano para «seguir el camino que también reconoció la Unión Europea, incluso en el último Consejo [el 19 de diciembre]; avanzaremos para combatir a los traficantes de personas y respetar las normas comunitarias. Las soluciones innovadoras han sido apreciadas también por otros países», dijo Tajani.

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El gobierno Meloni se vio obligado en noviembre a paralizar temporalmente el envío de inmigrantes a los dos centros de Albania, porque algunos tribunales italianos no convalidaron esas retenciones. El argumento de los jueces era que no se podía reconocer como 'países seguros' los estados de origen de las personas detenidas. Para ello, los magistrados se basaban en una sentencia del Tribunal de Justicia Europeo. El pasado 4 de octubre, la Corte europea estableció que para ser considerado 'seguro' un determinado país, el inmigrante no debe correr riesgo de sufrir formas de persecución o discriminación, como ocurre en Egipto y Bangladés, dos países de los que proceden muchas de las personas que llegan de forma irregular a las costas italianas.

Para evitar la confusión sobre los 'países seguros', el gobierno de Meloni aprobó en octubre un decreto ley con una lista de 19 naciones definidas 'seguras'; es decir, los inmigrantes rescatados en el Mediterráneo que procedan de estos lugares pueden ser detenidos en Albania hasta su repatriación. La lista de 'países seguros' la conforman la propia Albania, Argelia, Bangladés, Bosnia-Herzegovina, Cabo Verde, Costa de Marfil, Egipto, Gambia, Georgia, Ghana, Kosovo, Macedonia del Norte, Marruecos, Montenegro, Perú, Senegal, Serbia, Sri Lanka y Túnez.

Ahora el Gobierno Meloni dice que tiene razón y que puede proceder con la detención los ciudadanos de esos países en Albania, basándose en una sentencia del Tribunal Supremo italiano, emitida el 19 de diciembre: «La sentencia falló esencialmente a favor del gobierno italiano: los jueces pueden entrar a valorar un caso individual, pero no pueden descartarlo por completo [en referencia al plan Albania]», dijo Meloni. En definitiva, los magistrados de la alta corte reconocen el derecho de la política a establecer qué países son seguros y cuáles no. Al mismo tiempo, el Supremo reiteró que el juez «no puede reemplazar» al ministro de Asuntos Exteriores.

En este sentido, el titular de Interior, Matteo Piantedosi, ha explicado al 'Corriere della Sera': «La línea del gobierno ha sido trazada por el voto de los electores que han dado vida a la mayoría parlamentaria de centroderecha; desde hace tiempo, los italianos piden que se haga frente a la inmigración irregular e insostenible».

Poner de nuevo en marcha el plan Albania es para Giorgia Meloni el mejor regalo de Reyes. Cabe recordar que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y algunos países comunitarios consideraron que el plan de Meloni, con los dos centros en Albania, podría constituir un modelo para la gestión de la inmigración irregular que llega a Europa. «Tenemos que pensar fuera de los esquemas comunes: Italia fue el primero en firmar un acuerdo con un país no perteneciente a la UE, hay algunos problemas en la interpretación de las reglas, pero los estamos superando», sentenció Meloni