Meloni, ante la emergencia migratoria: «Defenderemos las fronteras, como han pedido los italianos»
Tras una conversación entre primera ministra y el presidente Macron, la nave Ocean Viking abandona aguas territoriales italianas y se dirige hacia el puerto de Marsella
Meloni, en su primer discurso como primera ministra: «Nunca tuve simpatía por el fascismo»
El enfrentamiento político sobre el problema de la inmigración se vive en Roma y en Bruselas, mientras el humanitario y sanitario está en algunos puertos italianos. La mano dura del Gobierno Meloni contra las naves de las ONG suscita oposición en Bruselas y en ... la ONU, pero obtiene el resultado de que también se escuche la voz de Italia que pide una estrategia y responsabilidad común europea en el grave problema migratorio. Eran cuatro las naves, dos con bandera alemana y otras dos noruegas, cargadas con inmigrantes salvados en el Mediterráneo, en lucha con el Gobierno italiano desde hace días para atracar en un puerto italiano. El Gobierno de Giorgia Meloni decidió la semana pasada permitir solo el desembarco, por razones humanitarias, a las personas en condiciones de salud precarias, mujeres embarazadas y menores.
En esta situación de emergencia se ha producido un cambio significativo en las últimas horas, tras un coloquio mantenido por la primera ministra Giorgia Meloni y el presidente francés Emmanuel Macron. En la tarde del martes, la nave Ocean Viking, de la ONG franco-italo-alemana-suiza Médicos Sin Fronteras abandonó aguas territoriales italianas cerca de Sicilia para dirigirse a Marsella (Francia). Allí desembarcarán los 234 inmigrantes a bordo del barco Ocean Viking, en el mar desde hace 20 días, y todos serán registrados como solicitantes de asilo.
Al mismo tiempo, en la noche de este martes comenzó el desembarco en Catania (Sicilia) de la nave Geo Barents de Médicos Sin Fronteras, con bandera noruega, que había salvado 572 inmigrantes en varios naufragios. En principio, el Gobierno italiano autorizó solamente el desembarco de enfermos, mujeres y niños. Pero las autoridades sanitarias, después de la inspección a bordo, recomendaron que los más de 200 inmigrantes que aún permanecían en el barco, debían abandonarlo. Todos ellos fueron considerados por los médicos como personas «frágiles, con un alto riesgo psicológico». Se ha intentado evitar que se agravara aún más la tensa situación en el puerto siciliano de Catania.
Italia bloquea cuatro barcos de ONG con más de un millar de inmigrantes
El Gobierno Meloni solo permite el desembarco de enfermos, mujeres embarazadas y menores
Desesperados
El lunes se lanzaron al agua tres de los inmigrantes del Geo Barents, desesperados porque no fueron considerados, en la primera inspección sanitaria, como personas «frágiles». Un portavoz de la ONG Médicos Sin Fronteras manifestó que la noticia supone «un gran alivio después de semanas de espera».
La primera apertura, o cesión, del Gobierno italiano se produjo el lunes, al permitir a la nave Rise Above, de bandera alemana, con 89 inmigrantes a bordo, que atracara en el puerto de Reggio Calabria. El desembarco de todas las personas se realizó en la mañana del martes.
El último caso, el de la cuarta nave de esta emergencia inmigratoria, la Humanity 1, con bandera alemana, que rescató a 179 inmigrantes, se encuentra en el puerto de Catania, donde desembarcaron la mayoría de las personas. Solo quedaron 35 a bordo, que como señal de protesta empezaron a rechazar la comida. La ONG Humanity presentó un recurso ante el tribunal civil de Catania, pidiendo el desembarco inmediato de los 35 migrantes. Mientras, el capitán del barco ha anunciado que en ningún caso abandonará el puerto siciliano.
Mensaje de Meloni
En un mensaje en Facebook, la primera ministra, Giorgia Meloni, ha reiterado su política de línea dura sobre inmigración: «En los últimos años – ha escrito-, hemos asistido a una gestión inadecuada del fenómeno migratorio, lo que ha producido grandes y evidentes inconvenientes: colapso de los centros de acogida, aumento de desembarcos, fuerzas del orden al límite de sus capacidades. Y todo ello ha propiciado un clima creciente de inseguridad generalizada». «Los ciudadanos -asegura Giorgia Meloni- nos han pedido que defendamos las fronteras italianas y este gobierno no traicionará su palabra».
La política de mano dura del Gobierno Meloni ha motivado que la ONG Salvamento Marítimo Humanitario, fundada en Zarauz (Guipúzcoa) en 2015, haya decidido reenviar su misión en el Mediterráneo, ante «la incertidumbre sobre las medidas que podría adoptar el nuevo Gobierno italiano». Al dar cuenta de esta noticia, el vicepresidente, Matteo Salvini, ministro de Transportes, responsable de la Guardia Costera, la destaca como una victoria del Gobierno y escribe en Twitter: «Italia no será cómplice del tráfico de seres humanos. Algunos empiezan a entenderlo».
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