El presidente de México se trabuca en un discurso y reaparecen los rumores sobre su estado de salud

En esta ocasión los rumores corren como la pólvora por un vídeo viral de hace cinco días, que acaba de salir a la palestra informativa. En su discurso diario, grabado por el habitual equipo de cámaras, AMLO duda del precio de la tortilla (el alimento esencial y prioritario en México) a la que compara con un dólar y después con la gasolina en un morrocotudo titubeo.

Las voces que le corrigen no se hacen esperar. El tabasqueño mantiene la mirada perdida y no consigue salir del embrollo. «Me decía un tortillero que un dólar (pausa de cinco segundos). Dólar… Tortilla… Falta uno. Ahora me acuerdo, pero… El equivalente. Yo le decía de que no porque, pues es este, el dólar está por debajo de 20 pesos (le corrigen), la tortilla no… (Sonrisa de medio lado). En algunos lugares… Estoy tratando de acordarme de lo otro que es el equivalente… Ah! Ya sé! Gasolina. Un dólar la gasolina, un dólar (Eh…) La tortilla, y un dólar… ¿Qué dije? (La gasolina le aclara un periodista) Gasolina. No. Gasolina. Tortilla. No, ya me voy a acordar. (Mirada ida) Este sí…», fue el errático comentario del mandatario ante los medios.

Los entredichos en la salud de Andrés Manuel López Obrador siempre son tema de debate en la sociedad y medios mexicanos. Ya es sabido, y así lo recogió ABC, del monitor de constantes vitales que AMLO lleva bajo su americana mientras se daba un paseo por el Palacio Nacional.

Eso sí, AMLO siempre es rápido y directo para aclarar sibilinamente cuando su salud es cuestionada sobremanera por la opinión pública.

El pasado enero el presidente mexicano se sometió a un cateterismo cardíaco en el Hospital Central Militar de Ciudad de México por lo que tuvo que suspender su agenda varias jornadas. Y es que el mandatario sufrió un infarto del que se operó de urgencia en 2013 lo que le colocó como paciente de riesgo cuando contrajo el virus pandémico. La operación de media hora de hace nueve años conllevó que un catéter se introdujera en un vaso sanguíneo para comprobar afecciones cardiacas.

Así el 16 de febrero pasado las redes sociales volvían a hacer viral un posible doble infarto del político. Esta vez fue un dato falso debido a que el funcionario de más alto rango de México se encontraba supervisando la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, en el Estado de México.