El Kremlin anuncia un aumento significativo de las Fuerzas Armadas del país para intensificar la guerra en Ucrania

«De aquí a final de año está previsto crear dos cuerpos de ejército a nivel de toda Rusia y 30 agrupaciones militares, incluidas 14 divisiones y 16 brigadas», afirmó Shoigú el miércoles ante la cúpula castrense. Señaló que «el desarrollo progresivo y el aumento de las capacidades de combate de las Fuerzas Armadas se lleva a cabo de conformidad con la decisión del Comandante en Jefe Supremo», Putin. Shoigú explicó que «ya hay formado un nuevo cuerpo de Ejército, una división motorizada de fusileros la flotilla del río –ucraniano- Dniéper y una brigada de barcos fluviales de la flotilla». Subrayó que la mejora de la fuerza de combate «continuará en proporción a las amenazas emergentes para la seguridad del país».

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Shoigú prestó especial atención al «flanco suroeste», asegurando que la situación derivada de la guerra en Ucrania «permanece estando difícil». Dijo que, como consecuencia de ello, la Región Militar Sur «recibirá más de 16.000 unidades de armas modernas y equipamiento. Además, allí se pondrán en funcionamiento más de 360 ​​nuevas instalaciones de infraestructura militar, cuya construcción ya está a punto de finalizar». Hace un mes, Shoigú anunció la creación de dos ejércitos de reserva y seis divisiones utilizando los 540.000 soldados que entraron en servicio el año pasado mediante contrato.

El pasado mes de febrero, Putin incluyó las anexionadas regiones ucranianas de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia en el Distrito Militar Sur. De igual forma, el máximo dirigente ruso ordenó el restablecimiento de los distritos militares de Moscú y Leningrado en lugar del Distrito Militar Occidental, existente hasta ese momento. Shoigú declaró entonces que este cambio se hizo debido a la expansión de la OTAN, a la que se acaban de incorporar Finlandia y Suecia. El ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, advirtió que en esos dos distritos «pronto de desplegarán armas adicionales».

El 29 de noviembre de 2023, Putin firmó un decreto disponiendo que el número de efectivos de las Fuerzas Armadas rusas deba fijarse en 2,2 millones de militares. Para ello, Según el documento, el número de soldados debe aumentar en 1,3 millones, lo que significa 170.000 mil más de lo requerido por el anterior decreto similar de Putin, firmado en agosto de 2022, unas semanas antes de que se anunciara la movilización. Ambos decretos supusieron un aumento de más de 300.000 efectivos, que es la cifra estimada por algunos observadores occidentales de bajas en las filas rusas, tanto de muertos como de heridos. En definitiva, Shoigú insiste en que «el incremento en el número de efectivos de las Fuerzas Armadas se debe al aumento de las amenazas a nuestro país asociadas con la realización de la Operación Especial Militar en Ucrania y la ampliación en curso de la OTAN».

Rusia controla casi una quinta parte del territorio de Ucrania y, tras la reciente toma de Avdiivka, Putin ordenó a las tropas seguir avanzando hasta completar la ocupación de la región de Donetsk. El domingo por la noche, tras su victoria en las elecciones, el jefe del Kremlin dijo que la prioridad en su quinto mandato es continuar la contienda, «en primer lugar, debemos resolver los problemas en el marco de la operación especial en Ucrania, fortalecer nuestras capacidades de defensa y nuestras Fuerzas Armadas». Aseveró que el Ejército ruso «lleva ventaja en el frente (…) nuestras tropas están llevando a cabo algo más que una defensa activa, tienen la iniciativa, avanzan de forma constante, gradualmente, con cuidado, pero todos los días». También anunció que «en algún momento» habrá que crear una zona tampón o franja de seguridad en Ucrania, en la región de Járkov, para proteger la región rusa de Bélgorod de los ataques combinados de las tropas ucranianas y de las milicias rusas proucranianas hostiles al Kremlin.

Estos planes de reforzamiento del Ejército ruso surgen en un momento cuando Ucrania sufre un déficit agudo de armas y municiones. El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, alertó el martes que la supervivencia de Ucrania está en peligro. No obstante, la Inteligencia británica señalaba este jueves en un informe que «las fuerzas rusas siguen centrando sus operaciones en la provincia de Donetsk, con avances mínimos» a causa de las abundante bajas que sufrieron en los intentos de tomar Avdiivka. Por otro lado, la nota asegura que «la escasez de personal y municiones en el lado ucraniano está limitando su probabilidad de mantener las posiciones de defensa que mantienen».