«Kazajistán no reconoce a las autoproclamadas repúblicas del sureste de Ucrania. Son territorio ucraniano»

Para Kazajistán la próxima presidencia española de la UE brinda una nueva oportunidad, sobre todo en el tumultuoso contexto europeo: «Tenemos la intención de desarrollar la cooperación estratégica entre Kazajistán y la UE con un aumento del volumen de negocios comerciales, el desarrollo de infraestructuras de transporte y logística; en los ámbitos de la energía y los metales de tierras raras, el clima y la transición ecológica, así como en el desarrollo de la digitalización».

Inmersa en un proceso de cambios políticos, tras las protestas de enero de 2022 Kazajistán aprobó una nueva Constitución, hubo elecciones presidenciales (Kasim-Yomart Tokáev salió reelegido) y celebró elecciones legislativas en marzo con la participación de nuevos partidos políticos y la entrada de nuevas fuerzas de todo el espectro político así como diputados independientes en el Mazhilis. Asimismo ha habido reformas del poder judicial comenzando por el Tribunal Constitucional.

«Estamos en un periodo de cambios y somos conscientes que la democracia no se construye de la noche a la mañana, pero la dirección hacia la democracia es clara. Somos un país en transición», enfatiza el embajador kazajo, quien reconoce que la guerra de Ucrania ha trastocado todo en la región, también en su país, donde viven tres millones y medio de ciudadanos de origen ruso, es decir, el 15% de la población. La pasada semana en Astaná se celebró un foro internacional «con el objetivo de tender puentes y avanzar en la sostenibilidad energética a nivel mundial».

—¿Cómo está influyendo la guerra en Ucrania en el proceso de reformas?

—Todo el proceso de transición en Kazajistán está coincidiendo con un momento difícil desde el punto de vista geopolítico con la guerra en Ucrania. Me gustaría subrayar que, precisamente por ello, hay que ser muy valiente por haber elegido este camino ahora. Pero entendemos que los cambios son inevitables para el desarrollo de nuestro país. Quizá a alguien no le guste pero es nuestra elección.

—¿Cómo es la relación con Rusia?

—Con Rusia no cesamos nuestras relaciones. Es nuestro socio comercial más importante. Formamos parte de la Unión Económica Euroasiática, subrayo lo de «económica». Son relaciones económicas muy fuertes que tienen tradición histórica. Somos vecinos. Pero al mimo tiempo tampoco cesamos nuestra relación con Ucrania. Tenemos buenas relaciones con Rusia y Ucrania. Nuestro presidente habla con ambos presidentes, el de Rusia y el presidente Zelenski.

—Pero, ¿cuál es la posición de Kazajistán respecto a la invasión rusa de Ucrania?

—Kazajistán sufre muchísimo de esta situación. Nuestra percepción del conflicto es muy diferente a la de aquí, para nosotros los dos países, los dos pueblos, son muy cercanos históricamente. De 20 millones de ciudadanos que hay en Kazajistán, tres millones y medio son kazajos étnicamente rusos, pero también hay 500.000 ucranianos, que son también ciudadanos del Estado de Kazajistán. Ambos viven en paz, sin ningún problema... pero a nivel personal también es una tragedia. Es muy preocupante para nosotros. Económicamente también sufrimos muchísimo ya que Rusia es ahora el país más sancionado del mundo. Antes muchas de nuestras mercancías con destino a la UE pasaban por Rusia. Dicho esto, quiero decir una cosa claramente: Kazajistán no reconoce a las autoproclamadas repúblicas del sureste de Ucrania [en referencia a las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, apoyadas por Rusia], las consideramos territorio de Ucrania y estamos a favor de la integridad territorial de todos los países según la Carta de la ONU.

—Eso sí, Kazajistán no participa en las sanciones a Rusia...

—Sabemos que EE.UU., la UE y Occidente en general pusieron sanciones a Rusia. Nosotros no participamos en el régimen sancionador hacia Moscú, pero hay que subrayar que no vamos a ser un país por el cual se puedan eludir estas sanciones a través de nuestro territorio. Es casi imposible controlar a 20 millones de habitantes para que no violen las sanciones, pero estamos dando muchos pasos para que esto no ocurra. Desde el 1 de abril tenemos un control digital de todo el comercio que entra y sale de nuestro territorio, por ejemplo. En este ámbito queremos contar con el apoyo económico y político de la UE y España.

—Entiendo que Kazajistán no está en una posición de poder condenar la invasión rusa, de alzar la voz...

—Estamos en un sándwich entre Rusia, el país más sancionado del mundo, y al sur, tras nuestros vecinos de Asia Central, se encuentra Afganistán, también tenemos a Irán, que es el segundo país más sancionado del mundo... Por otra parte, está China que es nuestro vecino y socio, con quien tenemos buenas relaciones. Esta es, en definitiva, nuestra situación geográfica y geopolítica. Estamos donde estamos.

—Imagino que su jefe, el ministro de Exteriores kazajo, tiene mucho trabajo...

—Sí, sí, es verdad... Por eso pido siempre en España y la UE que hay que entender la situación geográfica y la realidad de Kazajistán. Todo ello nos hace diferentes. Pero al mismo tiempo estamos dispuestos a mediar.

—¿El presidente de Kazajistán ha hablado recientemente con Putin?

—No es un secreto que ha viajado varias veces, y hace unas semanas, a Moscú para participar en la reunión de los mandatarios de la Unión Económica Euroasiática. Pero ahí él mismo fijó su posición.

—China está aprovechando la guerra en Ucrania para ganar influencia en Asia Central.

—En los últimos años China ha aumentado su presencia económica en nuestra región pero es mutuamente ventajosa. Hace un mes nuestro presidente viajó a China donde se firmaron 23 acuerdos políticos y económicos.