La Justicia argentina reabre una investigación contra Cristina Fernández de Kirchner por blanqueo de capitales

La causa, que fue centro de atención de la prensa argentina durante largos meses, involucraba también al empresario afín al kirchnerismo Lázaro Báez, quien finalmente fue condenado a 10 años de prisión por lavado de dinero. No obstante, Cristina Fernández de Kirchner había sido finalmente sobreseída en esta causa el pasado 5 de junio, al no quedar ya acusaciones en su contra.

Sin embargo, la situación de la funcionaria en esta causa sufrió un repentino vuelco esta semana. A casi 10 días de haber sido derrotado el kirchnerismo en las urnas en la segunda vuelta presidencial del 19 de noviembre, cuando el candidato oficialista y ministro de Economía, Sergio Massa, resultó perdedor, la causa ha sido reabierta.

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Sucede que la Asociación Civil Bases Republicanas – localmente vinculada a la oposición al Gobierno actual- pidió presentarse como damnificada en el caso. Como consecuencia de ello, dos jueces han decidido este martes revocar el auto de sobreseimiento del pasado mes de junio.

Cabe recordar que la vicepresidenta en funciones –que permanecerá en este cargo hasta el próximo 10 de diciembre- tiene todavía varias causas pendientes. Una de las más importantes es, sin lugar a dudas, la conocida como 'Vialidad', por la cual fue condenada a seis años de prisión, además de la inhabilitación para ejercer cargos públicos tras ser haber sido acusada de corrupción.

El mismo día que la vicepresidenta argentina recibió un fuerte revés judicial, el exmandatario Mauricio Macri tuvo, en cambio, una buena noticia: la Cámara de Casación confirmó el martes su sobreseimiento –así como el de los exjefes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI)- en la causa en la que era investigado por espionaje de los familiares de las víctimas del hundimiento del submarino ARA San Juan, ocurrido en el año 2017.

La Justicia consideró esta semana que las actividades llevadas a cabo por la AFI en su momento formaban parte de las tareas vinculadas con la seguridad del entonces presidente y, por ende, decidió descartar la hipótesis de espionaje ilegal.