Israel califica de «banda» al nuevo régimen establecido en Damasco

Sa'ar se refiere al nuevo 'hombre fuerte' de Siria, Ahmed al Sharaa, con su nombre de guerra cuando estaba reclamado en Occidente como líder terrorista: Abu Mohamed al Julani. Israel no está de entrada convencida de la sinceridad de Al Sharaa, que se presenta como 'moderado' y 'abierto a una Siria para todos', también a sus minorías chií y cristiana; y prefiere esperar a los hechos.

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Algunos, según observa en la entrevista el canciller israelí, no son tranquilizadores. Como por ejemplo que el nuevo ministro de Justicia sirio haya pedido la retirada de todas las jueces, y que sus casos sean transferidos a los magistrados varones.

Para Gideon Sa'ar, lo que tenemos ahora en Damasco es el líder de un movimiento islamista suní, que en su momento fue una filial de Al Qaida; «mientras en la provincia de Idlib manda otra banda; esto no puede calificarse de estabilidad en Siria».

¿Por qué acuden entonces tantos representantes de Occidente a Damasco para entrevistarse con Al Sharaa, mientras su vecino Israel aún no lo ha hecho? «Tiene que ver con los millones de refugiados sirios no solo en Turquía y Jordania sino también en Europa. El objetivo de los viajes de diplomáticos a Damasco es claro: la situación, dicen, ya es estable, por lo que puede procederse al retorno de los refugiados a Siria. Ese anhelo explica mucho del proceso actual».

En ese afán por blanquear al nuevo régimen cuenta también, añade Sa'ar, «el sentimiento antirruso en Europa. Con la caída de Bachar al Assad han perdido los intereses de Moscú, y eso produce gran satisfacción en Europa, y un deseo de rehabilitar al nuevo régimen de Damasco. En Israel preferimos esperar, porque la decepción puede ser al final grande».

Israel no esperará con los brazos cruzados. De entrada ha bombardeado arsenales sirios para que no caigan en manos del nuevo régimen; y ha ocupado militarmente la 'zona de separación' de los Altos del Golán, que ya conquistó en la guerra de 1967. «Son medidas para protegernos en medio del caos actual en Siria; creemos que Occidente comprende nuestras razones al tomar esas cautelas, aunque sabemos que serán criticadas», advierte el ministro israelí.