La India libra contra China la batalla de la influencia en África

Desde la llegada al poder en 2014 del actual primer ministro indio la relación afro-india se ha intensificado, puesto que India quiere mantener su influencia a la vez que se nutre de los recursos y el comercio africanos, pero también para frenar la feroz competencia de China.

Se calcula que en la actualidad hay más de tres millones de ciudadanos indios en África. Los principales mercados africanos de la India están en Sudáfrica, Nigeria, Egipto, Kenia, Togo, Mauricio, Madagascar, Mozambique y Tanzania. Ello se traduce, por ejemplo, en la cada vez mayor influencia cultural india en el continente a través de la música, la industria del cine o la literatura.

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Modi ha dejado muy claras sus intenciones. El mandatario indio comentó que su país ha trabajado incansablemente para amplificar la voz de África en el escenario global en los últimos años. «Hicimos esfuerzos significativos para garantizar que la Unión Africana se convirtiera en un miembro permanente, y lo logramos», explicó. Según el primer ministro Modi, «la India ha surgido como un faro de esperanza para el mundo».

Modi aprovechó la oportunidad para destacar los avances realizados por India en diversos sectores en los últimos años, en particular la expansión masiva en la industria manufacturera del país.

Este país se encuentra entre los mayores fabricantes de teléfonos móviles del mundo. Del mismo modo, las exportaciones de defensa de India se han multiplicado casi 30 veces en el último año. «Hoy, exportamos equipos de defensa a más de cien países», señaló Modi.

Según explica Javier Fernández Aparicio, analista principal del Instituto Español de Estudios Estratégicos, «el interés actual de India es de orden geoeconómico, pues el cabo de Hornos, el litoral del Cuerno de África y el estrecho de Ormuz son zonas de paso de los suministros de petróleo, minerales y otros productos que permiten al país mantener las necesidades internas y atender a la importación y exportación de una industria en crecimiento, por ejemplo, en el sector tecnológico o en la fabricación y comercialización de medicamentos. Por el Índico transitan, entre otros, el 50% de los contenedores del mundo y el 70% de los productos petrolíferos».

Para Fernández Aparicio «la India no solo quiere mantener esta influencia, sino también acceder a los recursos y el comercio africanos, lo que conlleva una competencia con China y, por ello, la seguridad se ha conformado en otro de los puntos clave de esta relación. La India se presenta cada vez más como un socio fiable en materia de defensa para los países africanos y más en concreto para los situados en el litoral oriental del Índico, zona de rutas marítimas vitales para India».

«India ya es uno de los socios comerciales más relevantes en África, tras China, Estados Unidos y a la par que la Unión Europea, pero a diferencia de estadounidenses y europeos, no tiene en contra una narrativa histórica y política negativa en muchas sociedades africanas«, agrega. »Respecto a China, el aumento de la presencia del dragón asiático en África hace que la India pueda ver amenazado o bloqueado su acceso a determinados recursos y que se levante como un obstáculo a su propia proyección«, subraya Fernández Aparicio.

Jesús Romero, periodista y analista internacional especializado en África, comenta que en 2018 Modi dijo en Uganda que África está en «el primer lugar entre nuestras prioridades» asegurando que la India intensificará y profundizará un compromiso sostenido y regular. «Para India, África es un lugar donde proyectarse como superpotencia», afirma Romero.

Entre los compromisos de Modi destaca haber promovido o invertido en numerosos proyectos en infraestructuras, agricultura, el procesamiento de alimentos, salud, riego, energía solar e industria manufacturera. También en capacitación y educación de poblaciones africanas.

Asimismo, las exportaciones indias a la región están en crecimiento constante. Destaca aquí el liderazgo del sector privado, que pretende que su inversión llegue a los 150.000 millones de dólares anuales para 2030. La India es, además, el segundo mayor prestamista de África.

Romero explica que «India tiene con Kenia importantes acuerdos navales y se han realizado ejercicios militares conjuntos en el Índico».

Plotin Yambenga, periodista congoleño, señala a ABC desde Kinshasa que «la India es uno de los países que ha comprendido que África en general, y la República Democrática del Congo en particular; representan un importante mercado comercial. En las principales ciudades del país, la presencia de comerciantes indios es muy notable. Trabajan sobre todo en los sectores sanitario y farmacéutico, pero también en logística«.

Yambenga comenta que «los principales hospitales de Kinshasa son propiedad de empresarios indios, al igual que los supermercados y las grandes superficies farmacéuticas. También tienen la principal compañía de transporte aéreo del país, que se ocupa de la logística en las 26 provincias de la república».

Según estadísticas recientes de la Federación de Empresas Congoleñas (FEC), más del 60% de la economía congoleña está abastecida por expatriados, principalmente indo-paquistaníes. Son los dueños de las grandes fábricas de Kinshasa. «Dicho esto, creo que es justo decir que India tiene ahora una mayor influencia en los negocios en África que Estados Unidos, o incluso Rusia», concluye.

Pero el Congo no es una excepción. Aissatou Diallo, fundadora y presidente de la asociación humanitaria contra la ablación de la mujer Africana (Ahcama), señala que «la influencia de la India en África, especialmente en países como Guinea Conakry, representa un tema de creciente relevancia en el panorama internacional«.

«En un momento en que las relaciones globales están en constante transformación, y con potencias como China consolidando su presencia en el continente, el papel de la India emerge como una oportunidad clave para fortalecer alianzas, promover el desarrollo sostenible y diversificar los vínculos económicos y culturales. Desde Guinea Conakry, esta perspectiva adquiere un matiz especial, considerando las expectativas y desafíos que el continente enfrenta en el contexto actual», puntualiza.

En el caso de Guinea Conakry, la relación con India se ha visto reflejada en intercambios diplomáticos, culturales y económicos. La presencia de la diáspora india en África, particularmente en países del este y sur del continente, ha fortalecido estos vínculos, promoviendo el comercio y las inversiones en sectores clave como la minería, la tecnología y la agricultura.

«Uno de los aspectos más destacados de la relación entre la India y África es la cooperación en los sectores de educación y salud. Miles de estudiantes africanos, incluidos de Guinea Conakry, han recibido becas para estudiar en universidades indias, fortaleciendo así el capital humano en el continente», subraya Diallo.

Parece evidente que India tiene el potencial para ser un socio estratégico clave para África en el siglo XXI. Para los países africanos esta relación representa una oportunidad única de desarrollo y cooperación en áreas fundamentales como infraestructura, salud, educación y comercio. Eso sí, ante la atenta mirada de potencias como Rusia y Estados Unidos, y la cada vez mayor influencia china.