EE.UU. deporta a la dictadura de Cuba a más de cien migrantes irregulares en medio de la tensión entre ambos países

Las autoridades cubanas notificaron que la primera operación de este tipo tuvo lugar el 23 de enero y que ya «suman 11 devoluciones desde distintos países de la región en el 2025, con un total de 296 personas».

Hasta el momento, no ha trascendido la identidad de los cubanos deportados, solo que se trata de 84 hombres, 19 mujeres y un menor. A través de las redes sociales se supo que dentro del grupo se encontraba la influencer cubana Cinthya Medrano García, conocida como La Cintumbare, quien llevaba semanas bajo custodia de ICE y había entrado al país con permiso humanitario hace casi tres años.

En una escueta nota oficial, el diario oficialista Cubadebate notificó que uno de ellos fue trasladado a un órgano de investigación por ser presunto responsable de hechos delictivos antes de salir del país, mientras que otros dos fueron detenidos por haber abandonado la Isla de manera ilegal mientras se encontraban en libertad condicional.

La Habana y Washington reanudaron los vuelos de deportación en abril de 2023, enfocados principalmente en personas consideradas «inadmisibles» tras ser retenidas en la frontera de Estados Unidos con México. Asimismo, mantienen un acuerdo bilateral mediante el cual todos los migrantes que lleguen por mar al territorio estadounidense serán devueltos a la Isla.

Las salidas ilegales por vía marítima de cubanos desesperados por escapar de la grave crisis económica y la falta de libertades ha sido una constante en la Isla; uno de los períodos más intensos se conoció como «crisis de los balseros», en 1994. Miles de cubanos han perecido en el mar. Entre 2021 y 2024, alrededor de un millón de cubanos llegaron a los Estados Unidos, en medio de un contexto de escasez de alimentos, medicinas y otros insumos básicos. La administración de Biden implementó medidas que contribuyeron a disminuir las entradas ilegales por vía marítima, como el programa de permiso humanitario y las citas CBP1, mediante la cual miles de cubanos entraron a ese país a través de la frontera con México.

No obstante, según datos oficiales del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) indican que más de 42.000 cubanos en Estados Unidos tienen órdenes finales de deportación, pero el régimen de La Habana se ha negado a recibirlos.

En su anterior mandato, Trump deportó a la Isla unas 3.385 personas, su predecesor, Barack Obama, devolvió 341, y Biden, 978. Las actuales deportaciones se producen en un contexto de políticas migratorias más estrictas implementadas por la Administración de Donald Trump, así como de un aumento de tensiones entre ambos gobiernos.

El 20 de enero, el mismo día en que Trump hiciera su toma de posesión, revocó la medida de Biden de eliminar a Cuba de ls lista de países patrocinadores del terrorismo. Pocos días después, el Secretario de Estado, Marco Rubio, de origen cubano, aprobó la reinstauración de la Lista Restringida de Cuba, una «lista negra» que veta ciertas transacciones con compañías bajo el control de –o que actúan para o en nombre de– los servicios o personal militar, de inteligencia o de seguridad del régimen cubano. De igual forma, la pasada semana las autoridades cubanas informaron que Estados Unidos habían suspendido «el mecanismo de solicitud de un grupo de categorías de visas» que utilizan funcionarios del Estado cubano y sus dependencias para viajar a ese país.

En este sentido, la agencia AP refirió que una fuente anónima de la Cancillería cubana les había manifestado que el rechazo de estos visados guardaba relación directa con una disposición de Estados Unidos de 2020 que veta la entrega de visas a países que no cooperen con el proceso de deportación de migrantes.