Crematorios para hacer desaparecer los cuerpos del delito del narco en México

Jalisco, cuya capital es Guadalajara, es el estado con mayor cantidad de desaparecidos en México –aproximadamente 16.000 denuncias de personas con paradero desconocido– y buena parte de los ausentes son personas jóvenes.

Según reveló el periódico de la Ciudad de México 'El Universal' la pista para dar con el rancho en Teuchitlán vino de un joven que hace tres años fue «secuestrado por sicarios del cártel y permaneció un mes retenido hasta que, por un descuido de sus captores, logró escapar».

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Ese informante les dijo que al rancho, de unos cinco mil metros cuadrados, los sicarios le llamaban «el kínder». Era el primer filtro de ingreso a las filas del cártel de Jalisco.

«Cuando el informante llegó, tenían retenidas en el campo a unas 200 personas. Algunas habían llegado atraídas por falsas promesas de empleo o simplemente tras ser privadas de la libertad. Muchos otros se habían sumado por decisión propia», señala el matutino.

La presidenta Claudia Sheinbaum informó que ya se analiza la posibilidad de que la Fiscalía General de la República (FGR) atraiga el caso.

Durante su conferencia matutina de este martes cuestionó el desempeño de la Fiscalía estatal de Jalisco porque, según diversos registros, ese rancho ya habría sido revisado por autoridades estatales.

«No, pues, obviamente, es terrible. Ahora: ¿qué corresponde al Gabinete de Seguridad, a las Fiscalías y, en su momento, a los Tribunales o al Poder Judicial?, pues investigar y ver en particular en este caso que, ya se había hecho, entiendo, un primer... No sé si fue cateo exactamente», señaló Sheinbaum.

«Si la Federación está interesada en ser parte de las investigaciones, por supuesto que nosotros los recibiremos con los brazos abiertos. Independientemente de que estos sucesos no fueron dentro de mi mandato, nosotros tenemos que colaborar y hacer la parte que nos toca en las investigaciones y la localización de posibles restos», argumentó la mandataria.

Marcos Raygoza, antropólogo forense, le dijo al diario 'Mural de Guadalajara' que será complejo conocer más información sobre los restos encontrados en los hornos crematorios del rancho. «En un análisis morfoscópico, es decir, que le correspondería al área de Antropología, se podría decir que pertenecen a un adulto que probablemente su sexo era masculino o femenino, que tenía probablemente tal edad', pero mayores datos ya no podemos obtener», dijo el ex trabajador del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.

«Entonces, todavía, cuando poseemos el cadáver –ahora sí que como haya sido incinerado– podemos inferir, (por ejemplo), que tenía una prótesis dental o si tenía esto otro, pero como ya está manipulado (ya no). Si tenía una corona en los dientes, pues en la extracción sin método, esa pieza ya se pudo haber perdido y ya no sabemos a qué cadáver pertenecía», agregó.