Los demócratas recuperan un escaño en Nueva York en medio de la batalla por la inmigración

La elección especial se celebró para ocupar el escaño que dejó libre el polémico diputado republicano George Santos, expulsado de la Cámara por los fraudes y engaños que cometió durante la campaña de 2022. Santos, un candidato joven y con poca experiencia política, plagó su campaña de mentiras -desde que jugó a voleibol en la universidad a las entidades financieras en las que trabajó- y utilizó fondos de donantes para lujos personales.

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La victoria de Santos en 2022, como la de otros candidatos del partido en Nueva York, un estado de fuerte implantación demócrata, fue clave para que los republicanos consiguieran entonces la mayoría en la Cámara de Representantes. Son distritos moderados, con las fuerzas más igualadas entre ambos partidos, y el mensaje de dureza contra el crimen y de firmeza ante la inmigración fue decisivo para ganar.

Ahora la victoria de Suozzi no solo supone que la mayoría republicana en la Cámara Baja se puede permitir todavía menos defecciones y que es más débil de cara a noviembre. También supone una hoja de ruta para los demócratas sobre inmigración, un asunto que será decisivo para ver cómo quedan las mayorías en el Congreso tras la elección y quién se queda las llaves de la Casa Blanca.

La elección especial en Long Island se celebró en medio del toma y daca en el Congreso sobre la aprobación de una ley presupuestaria para financiar la lucha contra la inmigración masiva de indocumentados en la frontera sur. Los demócratas del Senado, con un apoyo importante de legisladores republicanos, han aprobado una ley que incluye financiación multimillonaria para Ucrania e Israel. Los republicanos de la Cámara de Representantes, con más presencia del ala dura, se oponen y buscan que la financiación para política migratoria vaya desparejada de otros asuntos.

En la elección también impactó la presión migratoria que vive la ciudad de Nueva York (una parte del término municipal, el extremo este de Queens, pertenece al distrito que ganó Suozzi). La mayor ciudad de EE.UU. ha visto cómo han llegado 170.000 inmigrantes en el último año, ante reclamaciones continuas del alcalde -Eric Adams- de que los servicios sociales no dan abasto y con incidentes de seguridad provocados por algunos de ellos.

Suozzi, en lugar de tratar de evitar el debate, fue de frente y defendió las políticas propuestas por Biden en el acuerdo que ha prosperado en el Senado, que incluyen el endurecimiento de las condiciones para quedarse en EE.UU., la financiación de un sistema que permita deportaciones ágiles y ampliación de los centros de detención y procesamiento de solicitudes de asilo. Al mismo tiempo, complementó su mensaje con la defensa del aborto y con ataques a Trump, dos asuntos que estimulan el voto demócrata.

«Esta campaña se ha centrado en la inmigración y en la economía, como pasa en el resto del país», dijo Suozzi en la celebración de los resultados. «Hemos ganado la elección porque nos hemos enfrentado a esos asuntos y hemos encontrado una manera de cerrar nuestras divisiones».

Su victoria podría ser una señal para los demócratas de que el peso de la inmigración, una de las grandes cartas electorales de Trump, podría tener un peso relativo en zonas moderadas como Long Island. Y esas son las que decidirán la elección en noviembre.