ANÁLISIS DEL GENERAL (R) PEDRO PITARCH
Las citas electorales influirán en el devenir de la guerra de Ucrania
El cansancio de los donantes ha tenido funestas consecuencias para Kiev, que depende para todo del apoyo occidental
Ucrania, el conflicto bélico eclipsado
Pedro Pitarch
El año 2023 se ha despedido con una intensificación de los bombardeos recíprocos entre Ucrania y Rusia. El 26 de diciembre, misiles ucranianos, al parecer lanzados desde el aire, atacaron la base naval de Feodosia (Crimea) dañando gravemente al buque anfibio Novocherkassk. ... Tal acción se produjo en el marco de la mal llamada batalla del mar Negro, monitorizada por el Reino Unido desde Odesa.
La represalia rusa, el día 29, fue una descomunal oleada de misiles y drones contra objetivos por toda Ucrania (Kiev, Dnipropetrovsk, Járkov, Odesa y Leópolis, entre otros). Lo que fue respondido, al día siguiente, por bombardeos ucranianos contra territorio ruso en la zona de Bélgorod, en una acción ofensiva de dudosa y grave finalidad al haberse utilizado medios cedidos por Occidente a Ucrania para, supuestamente, defenderse ésta dentro de su territorio.
En respuesta, las tropas rusas han abierto 2024 bombardeando profusamente objetivos en Kiev y Járkov. Todas estas acciones, aunque no tienen un significado mayor en el desarrollo de la guerra, están sirviendo a Kiev para atraer la atención internacional sobre una guerra casi olvidada y, a Moscú, para exhibir frente a Occidente su gran capacidad y firme voluntad para proseguir una guerra que, tras el fracaso de la contraofensiva de verano ucraniana, devino en el estancamiento de las operaciones y, con ello, en un notable debilitamiento del apoyo, económico y militar, a Ucrania. A partir del 7 de octubre, a tal merma material se añadió la apatía de Occidente, que desplazó su interés a Oriente Próximo, tras la brutal carnicería de los terroristas de Hamás en los kibutz periféricos a la franja de Gaza.
Valquirias ucranianas, armadas y peligrosas: «No se repetirá otra Bucha»
Miriam GonzálezLa movilización militar no es obligatoria para las mujeres, pero todas son conscientes de que necesitan protegerse. Aunque el frente está lejos, ellas quieren estar preparadas en el segundo invierno de esta guerra y por eso reciben instrucción
Tal desinterés, al solaparse sobre el cansancio de los donantes, ha tenido funestas consecuencias para Ucrania. Kiev, que depende para todo del apoyo occidental, difícilmente podrá prolongar su esfuerzo operativo. Sus tropas carecen de reservas materiales y su pretensión de incrementar tropas en 500.000 efectivos parece una entelequia para un país que contaba con 43 millones de habitantes antes de la guerra y que, como consecuencia de ella, ha perdido alrededor de 10 millones (refugiados fuera del país), más cerca de otros 7 millones en los territorios ahora bajo control ruso, a los que se añadirían las bajas civiles y militares producidas en las hostilidades.
Además, los crecientes síntomas de descomposición interna, cansancio y baja moral son fácilmente perceptibles entre los dirigentes políticos, que se atacan recíproca y verbalmente a la vez que acusan a Occidente y particularmente a Europa -el ministro de Asuntos Exteriores, Dmitro Kuleba, es ejemplo de ello- de la ausencia de éxitos en el campo de batalla. Para ellos, Europa es culpable de no facilitar a Ucrania suficiente material bélico, o hacerlo muy lentamente. Incluso, el Jemad ucraniano, Valeri Zaluzhni, ha mantenido públicamente discrepancias con el presidente Volodímir Zelenski sobre la conducción de la guerra. En fin, una nociva atmósfera que apadrinaría un potencial y súbito colapso de las tropas ucranianas.
Mientras Kiev se debilita, Moscú aparenta no tener prisa en la ocupación de nuevos territorios. La estrategia rusa no pasaría ahora tanto por la ganancia de terreno, como por la erosión y debilitamiento de las fuerzas ucranianas, que ya están a la defensiva en todo el frente. Bien que, con tales propósitos como fondo, las tropas del Kremlin estén avanzando por distintas zonas del frente: Kupiansk, Bajmut, Avdivka y Marinka, entre otras. Y, simultáneamente, los misiles y drones kamikazes rusos machacan infraestructuras, cuarteles generales e instalaciones logísticas ucranianos. Parece así que el ritmo para alcanzar un alto el fuego o un armisticio, donde Rusia impondría sus condiciones, será la medida de la voluntad de Vladímir Putin.
Ese es el escenario dominante al inicio de 2024. Un año con citas electorales en Rusia, la Unión Europea, Estados Unidos y la propia Ucrania que han de condicionar el desarrollo de la guerra. En marzo, se celebrarán las presidenciales en Rusia en las que Putin se dibuja como el favorito indiscutido. Está por ver si una eventual negociación para la finalización de la guerra se abrirá antes o, mejor, después de estas elecciones. En junio, se desarrollarán los comicios para el Parlamento Europeo, que serán seguidos por la renovación de la cúpula política de la Unión (Parlamento, Presidencia del Consejo y Comisión, entre otros).
En noviembre, serán las presidenciales en Estados Unidos; al presidente Biden le será difícil escaquearse totalmente de la guerra en Ucrania, el gran chasco estratégico de su Administración en el exterior, antes de que de que la campaña electoral tome cuerpo. Y, en Ucrania, no se sabe cuándo serán las elecciones ya que, en octubre, no se celebraron las previstas legislativas y, en marzo de 2024, deberían efectuarse las presidenciales; precisamente cuando el vivaracho y omnipresente Zelenski parece estorbar a todos, dentro y fuera de Ucrania. Posiblemente, la guerra en Ucrania podría concluir en 2024 y Ucrania seguirá existiendo. Pero ¿qué Ucrania?
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete