Biden busca acabar el conflicto en Gaza antes de dejar la presidencia

Ambas partes coincidieron tras la reunión en que ese acuerdo está cerca y es factible, pero que necesita de la concurrencia de Hamás, algo que lo hace complicado. Israel se ha marcado, como ha repetido Netanyahu, la erradicación de Hamás, y mantiene que no pretende ocupar Gaza militarmente como hizo hasta 2005. Tras el encuentro bilateral, los dos mandatarios recibieron a familiares de los rehenes raptados por Hamás el pasado 7 de octubre. Un centenar de ellos siguen capturados en Gaza, varios de ellos, según el gobierno estadounidense, han fallecido.

Netanyahu, sonriente en el Despacho Oval, bromeó con Biden, y le dijo: «Soy un orgulloso judío sionista que le agradece su compromiso con el Estado de Israel a un orgulloso sionista irlandés americano». El presidente asintió, y recordó que se ha reunido con prácticamente todos los primeros ministros israelíes desde los años de Golda Meir. Lleva medio siglo en política, va a cumplir 82 años y, precisamente, su edad y deterioro físico y cognitivo es lo que le ha llevado a renunciar a la candidatura para reelegirse, cediendo el relevo a su vicepresidenta, Kamala Harris.

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Javier Ansorena | Corresponsal en N. York

La vicepresidenta y potencial candidata demócrata ha excusado su ausencia como una cuestión de agenda

Esta decidió recibir a Netanyahu por separado, en un encuentro privado, tras haber pasado la mañana en Houston haciendo campaña con sindicatos.

El viernes, el mandatario israelí viajará a Florida, para verse con Donald Trump, después de haber cambiado sus planes de viaje. Iba a ir el jueves, pero Biden le comunicó que le recibiría ese mismo día, tras haber dado un discurso a la nación explicando su renuncia a la candidatura. Trump aclaró en sus redes sociales que cambiaba el día a petición de Netanyahu.

La Casa Blanca estaba este jueves fortificada, rodeada de un perímetro de vallas y barricadas, custodiada por un fuerte dispositivo del Servicio Secreto. En las calles aledañas, varias decenas de manifestantes, muchos enmascarados, la cara tapada con pañuelo palestino, protestaban contra Netanyahu, acusándole de ser un «criminal de guerra». Junto a las banderas palestinas, dos personas portaban un muñeco de cartón piedra que simbolizaba a Netanyahu, con las manos y la cara manchada de sangre, y un cartel en que se leía «Se busca».

Netanyahu dio el miércoles un discurso ante las dos cámaras del Capitolio en el que prometió que la guerra contra Hamás en Gaza no acabará hasta que Hamás haya sido erradicado completamente. La mitad de la bancada demócrata lo boicoteó, al igual que la vicepresidenta Harris, que había sido invitada porque una de sus labores es la de presidir el Senado. Con este último discurso Netanyahu es el mandatario extranjero que más veces ha hablado en el Capitolio, cuatro en total, una más que Winston Churchill.

En las protestas por el discurso del miércoles, hubo una treintena de detenidos. Una turba arrió banderas americanas cerca del Capitolio, y quemó varias de ellas, en señal de protesta. Por la noche, un grupo de diputados republicanos, comandados por el presidente de la Cámara, Mike Johnson, fue a izar nuevas banderas en esos mismos mástiles. La vicepresidenta Harris, por su parte, también condenó esas acciones, que describió, en un comunicado, como «acciones despreciables de manifestantes antipatrióticos, con un discurso peligroso y lleno de odio».