Berlusconi se disculpa con Meloni por insultarla y se subordina a su autoridad

Tras un encuentro de poco más de una hora, se distribuyó a los medios de comunicación una foto con ambos sonrientes, y una nota conjunta en la que se subraya que hubo «unidad en los objetivos» para la formación rápida de un «Gobierno fuerte» y «máxima cordialidad y colaboración».

Berlusconi tuvo que justificarse por sus insultos a Meloni, escritos en un folio que un fotógrafo captó con un teleobjetivo. Esta fue la lista de adjetivos sobre su aliada de coalición: «Sabionda, prepotente, arrogante, ofensiva y ridícula». Aunque el último estaba tachado, era visible. En sus apuntes sobre la líder de Hermanos de Italia, escribió también: «No tiene disponibilidad al cambio, es alguien con quien no te puedes llevar bien».

A modo de disculpa por esos comentarios, Berlusconi explicó: «Ese no es mi pensamiento, sino una síntesis de las frases que escuché de nuestros senadores, muy tensos por los vetos de vuestros parlamentarios hacia nuestros representantes». Al tragicómico episodio de las notas del líder de Forza Italia, Meloni respondió con la máxima dureza: «En la lista faltaba un adjetivo: no soy chantajeable».

El encuentro sirvió para evidenciar el nuevo equilibrio de poder en el bloque de las derechas, con la sumisión del anciano líder a la que en el pasado llamaba 'piccolina' ('pequeñita') a Meloni, cuando fue ministra de la Juventud en su último Gobierno (2008-2011). Pero está por ver si se ha tratado de una verdadera pacificación o solo de una tregua, porque ciertas diferencias continúan. Por ejemplo, tras su entrevista con Meloni, el ex primer ministro dijo: «Debemos tener el mismo número de ministerios en la Liga, porque obtuvimos prácticamente los mismos votos [8 por ciento]».

Berlusconi tendrá al menos cinco ministerios, como la Liga, pero no los que deseaba, en especial Justicia y Desarrollo Económico. Ambos son una obsesión para él. El de Justicia, por una cuestión personal, ya que tiene todavía pendiente un proceso relacionado con el 'bunga bunga', sus fiestas con jóvenes. Y el de Desarrollo Económico por sus intereses en la televisión, capítulo fundamental en el imperio económico de Il Cavaliere.

Para el Ministerio de Justicia, Berlusconi ha propuesto a Elisabetta Casellati, de Forza Italia, expresidenta del Senado, mientras Meloni tiene otro claro candidato: el exmagistrado Carlo Nordio.

De momento, el único ministerio de peso para Forza Italia será el de Asuntos Exteriores, cuyo titular será, según todos los medios, Antonio Tajani, expresidente del Parlamento Europeo. El ministerio más importante, el de Economía, sería ocupado por Giancarlo Giorgetti, vicesecretario de la Liga, actual ministro de Desarrollo Económico en funciones, un economista competente al que se critica por su macarrónico inglés. Meloni intentó contar con un prestigioso técnico, el economista Fabio Panetta, exdirector general de Bankitalia y representante italiano en el Banco Central Europeo, pero rechazó el encargo.

El líder de la Liga, Matteo Salvini, que deseaba el Ministerio del Interior, se conformará con el de Infraestructuras, además de una vicepresidencia. El titular de Interior será, salvo sorpresas, un técnico, el delegado del Gobierno en la provincia de Roma, Matteo Piantedosi, que fue jefe de gabinete de Salvini. El titular de otro ministerio clave, Defensa, será Adolfo Urso, presidente del Comité Parlamentario para la Seguridad de la República (Copasir), con sólida relación atlántica.

Las dudas quedarán despejadas en breve. Está previsto que el presidente de la República, Sergio Matarella, inicie el próximo jueves las consultas con los partidos políticos. Entre el sábado y el lunes, Meloni podría jurar el cargo como primera ministra.