António Costa, una vida dedicada a la política marcada por el consenso y el diálogo

El líder socialista se convirtió a finales de 2015 en primer ministro, a pesar de no ganar las elecciones, y desde entonces no había abandonado el cargo. En aquella ocasión, accedió al poder dejando a un lado las diferencias con dos de sus rivales políticos, los comunistas de la Coligação Democrática Unitária y el Bloco Esquerda (BE), y logrando que lo apoyaran sin hipotecarse a sus postulados más radicales en un alarde de consenso y diálogo.

Tras heredar un país recién salido del rescate europeo, concluido en 2014, Costa empezó a revertir las medidas de austeridad implantadas hasta entonces, lo que aceleró la recuperación económica del país y le granjeó el reconocimiento del Fondo Monetario Internacional. Revalidó el cargo en las elecciones de 2019, en las que llevó a los socialistas a la victoria, y gobernó en minoría con apoyos puntuales de sus socios.

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Precisamente en 2019 Portugal registró su primer superávit presupuestario en 45 años de democracia, aunque posteriormente la pandemia de covid-19 volvió a disparar el déficit público. En 2021, la alianza de izquierdas se rompió, al rechazar los comunistas y el Bloco de Esquerda los presupuestos de Costa, lo que llevó a la convocatoria de elecciones en 2022.

En esos comicios legislativos del año pasado, Costa arrasó y logró la mayoría absoluta -la cuarta del Partido Socialista y la cuarta de la democracia lusa-, al alcanzar el 42% de los votos. Ahora, este éxito se ha visto empañado por la investigación por presunta corrupción y prevaricación y posterior dimisión del hasta ahora primer ministro.

No obstante, estos éxitos a nivel nacional no fueron sino el colofón a toda una vida en política. Hijo del escritor comunista Orlando da Costa -mozambiqueño de padres procedentes de la excolonia portuguesa Goa (ahora India)- y de la periodista y activista feminista Maria Antónia Palla, entró en política siendo un adolescente. Se licenció en Derecho y ha sido concejal, ministro y vicepresidente del Parlamento Europeo.

Durante los Gobiernos de Antonio Guterres (1995-2002) se situó al frente de las carteras de Asuntos Parlamentarios y Justicia, mientras que en el primero de José Sócrates (2005-2009) fue ministro de Administración Interna. Renunció tras dos años para presentarse con éxito a la alcaldía de Lisboa en 2007, en unas elecciones que venció para los socialistas y que revalidó en 2009 y 2013.

«Cierro una etapa con la conciencia limpia», ha señalado este martes Costa, que ha anunciado que no se presentará a las próximas elecciones y que los tiempos dependen del presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa.