Alemania suspende la acogida de solicitantes de asilo procedentes de Italia

Las solicitudes de protección internacional deben ser procesadas por el primer país europeo de registro del potencial refugiado y los solicitantes de asilo que se trasladan a otro país sin permiso, según los acuerdos vigentes, deberían ser devueltos al país de entrada. Pero Italia lleva nueve meses bloqueando completamente el regreso de los que Alemania intenta devolver. De las 12.400 solicitudes de devolución presentadas por Berlín entre enero y agosto de este año, solamente diez han sido atendidas por Roma.

Alemania ya había advertido al Gobierno italiano a finales de agosto de que la acogida sería «pospuesta hasta nuevo aviso en el marco del mecanismo voluntario de solidaridad europeo», debido a los «grandes desafíos que enfrenta actualmente Alemania en cuanto a sus capacidades de acogida y alojamiento». Hasta el momento han sido admitidas por este mecanismo más de 1.700 personas, de las cuales alrededor de un millar proceden de Italia, en un contexto de masificación del sistema alemán de acogida y con los gobiernos de los Bundesländer y municipios financieramente desbordados.

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Dentro del Gobierno alemán, además, el Partido Liberal (FDP) quiere clasificar a los Estados del Magreb como países de origen seguros junto a Georgia y Moldavia, lo que evitaría según sus cálculos unas 20.000 nuevas solicitudes de asilo cada mes. «Necesitamos este alivio para el sistema de asilo alemán», ha justificado el portavoz del Partido Liberal Alemán (FDP) en materia migratoria, Konstantin Kuhle, pesimista sobre el efecto de los acuerdos europeos: «Los traficantes de personas se adaptan, no se puede destruir este negocio».