Alemania limitará los beneficios sociales a los refugiados
Scholz suma a los Bundesländer a su gran pacto nacional para la migración y el asilo
Alemania endurece su política migratoria: «Necesitamos deportaciones a gran escala»
El canciller alemán, Olaf Scholz
Le ha costado al canciller Olaf Scholz toda una noche de negociaciones con los presidentes de los Bundesländer y una tarifa plana de 7.500 euros anuales que el Estado federal pagará por cada refugiado aceptado en Alemania a la administración local asignada para ... su acogida, pero a cambio ha logrado sumar a los gobiernos regionales a su gran pacto nacional sobre migración y asilo y, concretamente, para varias de sus medidas más drásticas, como reducir la recepción de beneficios sociales por parte de los refugiados a solamente el primer año y medio de estancia en Alemania y externalizar los procedimientos de asilo, de manera que puedan tener lugar en terceros países y sólo terminen llegando a territorio alemán los refugiados a los que la ley haya ya reconocido su derecho a ese estatus.
Scholz se ha felicitado esta madrugada por lo que considera un «acuerdo histórico» que en su opinión conseguirá el objetivo último de su significativo giro en política migratoria: «Hacer Alemania menos atractiva para los refugiados».
En el futuro, gracias a los acuerdos que Scholz ha ido cerrando con la oposición conservadora de la CDU y con los Bundesländer, los procedimientos de asilo deberían ser mucho más rápidos, los solicitantes de asilo recibirán considerablemente menos dinero, las tarjetas de pago sustituirán al dinero en efectivo para los beneficiarios de prestaciones y se avanzará en la externalización de los procesos de asilo en países fuera de las fronteras de la UE.
La declaración final del acuerdo con los Bundesländer contiene el siguiente párrafo: «El gobierno federal examinará si en el futuro la determinación del estatuto de protección de los refugiados puede tener lugar también en países de tránsito o en terceros países, respetando la Convención de Ginebra sobre los Refugiados y la Convención Europea sobre los Refugiados».
Procedimiento judicial
La primera decisión de la Oficina Federal de Migración y Refugiados deberá estar disponible al cabo de al menos seis meses, y el procedimiento judicial en primera instancia también debería finalizar al cabo de seis meses. Para los solicitantes de países con una baja tasa de reconocimiento, de menos del 5% como es el de Túnez, Albania o Kosovo, los procedimientos deberían ser aún más rápidos: tres meses. Para aliviar la carga de las autoridades de inmigración, los procedimientos de asilo deberán digitalizarse.
Como medida inmediata, la reagrupación familiar con personas con derecho a protección subsidiaria queda limitada temporalmente, salvo en casos de especial dificultad. El gobierno de Berlín se compromete a trabajar en Bruselas para que toda persona que llega a las fronteras exteriores de la UE sea controlada y registrada estrictamente, con el objetivo de que cualquiera que tenga pocas perspectivas de protección pase allí por el necesario proceso de solicitud y reciba respuesta en un corto período de tiempo. Scholz se ha comprometido también a reforzar FRONTEX. El documento dice específicamente: El Canciller Federal y los jefes de gobierno de los estados federados «están de acuerdo en que las conversaciones con importantes países de origen deben impulsarse intensamente al más alto nivel y concluirse lo antes posible» con el objetivo de concluir más acuerdos migratorios para aumentar las deportaciones.
Además, permanecerán activos los controles en las fronteras nacionales con Austria, Suiza, la República Checa y Polonia, basada en la colaboración entre los Bundesländer y la policía federal, para combatir el tráfico de personas y la inmigración ilegal.
Para llegar a este acuerdo, Scholz ha debido superar las divisiones internas en varios partidos. La dificultad más evidente era la de Los Verdes, que sin embargo ha visto un cierre de filas de todos sus líderes, tanto los ministros de la «coalición semáforo» como el presidente de Baden-Württemberg Winfried Kretschmann y la copresidenta del partido Ricarda Lang.
En su propio Partido Socialdemócrata ha encontrado Scholz seria resistencia, aunque ha contado con la colaboración activa de varios miembros del grupo parlamentario, que han presentado ante el Bundestag alguna de las medidas más controvertidas. Y aunque se había hecho por adelantado con el apoyo del líder de la oposición conservadora, Friedirch Merz, en dos reuniones que han tenido lugar en la Cancillería de Berlín, durante la última noche de negociaciones ha debido lidiar con los barones regionales de la CDU, a los que durante la refriega ha llegado a acusar de «intrigar» contra el líder de su partido.
La determinación con la que Scholz ha negociado este pacto nacional está relacionado con la destacada posición en la que se ha instalado en las encuestas el partido hostil a los extranjeros Alternativa para Alemania (AfD), al que espera aplacar tras conseguir poner orden en el escenario migratorio.