El 'agujero' que deja en la guerra de Ucrania el Grupo Wagner, un ejército de al menos 25.000 mercenarios

La intervención fue abortada a solo 200 kilómetros de la capital, por un acuerdo entre Vladimir Putin y el líder del comando irregular Yevgueni Prigozhin. Una muestra de las claras «grietas» internas del Kremlin, según Estados Unidos.

Más allá de las lecturas políticas sobre el alzamiento de los mercenarios, al Grupo Wagner se le reconoce como un brazo armado clave para Rusia. Uno de logros en la guerra ha sido la toma de la ciudad ucraniana de Bajmut, en la región de Donetsk, una misión que le costó alrededor de 16.000 bajas al cuerpo paramilitar, según dijo en su momento Prigozhin.

Se desconoce la cantidad de mercenarios Wagner que han sido desplegados en los campos de combate, pero se habla de que este ejército privado, en el que son admitidos los criminales de alta peligrosidad, ha llegado a tener hasta 50.000.

«Es casi seguro que Wagner comanda ahora 50.000 combatientes en Ucrania y se ha convertido en un componente clave de la invasión», confirmó el Ministerio de Defensa del Reino Unido en enero pasado.

Sin embargo, el mismo Prigozhin habló de 25.000 mercenarios el pasado viernes y se quejó de que al menos 20.000 de sus hombres han caído en los choques contra Ucrania.

Las fuerzas rusas en cambio se cifran en unos 800.000 soldados activos y 250.000 en reserva. De ahí que los militares rusos reportaron este domingo que la rebelión Wagner no afectó mucho los combates alrededor de la localidad de Bajmut, según un reporte de la agencia AFP.

No obstante, para el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, el motín del grupo paramilitar muestra de que la guerra de Ucrania está «resquebrajando» el poder ruso, y advirtió del peligro que supone la inestabilidad política en una potencia atómica.

El grupo Wagner, según Borrell, es un «monstruo» creado por el presidente ruso, Vladimir Putin, y ahora «el monstruo está actuando contra su creador. El monstruo muerde».

Por su parte el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, se ha referido a la rebelión Wagner como una «demostración más del gran error estratégico que cometió Putin con su anexión ilegal de Crimea y la guerra contra Ucrania».

En este sentido, Stoltenberg ha recalcado que frente al asalto ruso a Ucrania es aun más importante mantener el apoyo a Kiev, tras incidir en que cuanto más territorio logre retomar en su contraofensiva contra las tropas rusas, «más fuerte será su baza en una mesa de negociación».

Se conoce que la fuerza el bloque Wagner ha crecido exponencialmente desde 2014, cuando contaba con solo unos 5.000 mercenarios. La compañía irregular fue fundada por Dmitri Utkin, un antiguo comandante de la inteligencia militar rusa que le dio ese nombre Richard Wagner, el compositor favorito de Adolf Hitler.

De acuerdo con el Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, la agrupación armada engrosó sus filas peinando las cárceles rusas de los peores criminales con una oferta de alistarse para combatir en el frente de Ucrania a cambio de un indulto presidencial, un sueldo de más de 3.000 euros y la cobertura de los costos funerarios en caso de caer en combate.

«Nadie volverá a estar entre rejas. Si servís durante seis meses, sois libres. Si llegáis a Ucrania y decidís que no es para vosotros, os ejecutamos», se escucha decir a Prigozhin en un video difundido en redes sociales en septiembre de 2022.

Prigozhin es un oligarca conocido como 'el cocinero de Putin' porque se valió de sus influencias para encargarse del sirvió el catering para el ejército ruso.

Si bien el comando operó inicialmente de forma secreta, el Grupo Wagner, también conocido como PMC Wagner o ChVK Wagner, se define como una empresa militar privada, y es considerada una de las mayores compañías de este tipo a nivel mundial.