«Volcamos por el peso de todos los que íbamos dentro del camión»

El trágico suceso, uno de los peores ocurridos jamás en las carreteras mexicanas, supone una nueva llamada de atención sobre las condiciones extremas en que están dispuestas a viajar los desesperados inmigranes para alcanzar su meta final, Estados Unidos , de lo cual se aprovechan las mafias que trafican con personas.

Buena parte de los fallecidos y de los heridos en el accidente de Chiapas procedían de Quiché, región noroccidental de Guatemala , aunque también los había con nacionalidades de otros cuatro países, Honduras , Ecuador , República Dominicana y el propio México. Entre las víctimas hay adolescentes de 13, 14 o 15 años.

Mientras el guatemalteco Pacheco trataba de sobreponerse del ‘shock’ por el brutal accidente, a su alrededor iba gente de un lado a otro con heridos en camillas. Los primeros rescatistas que acudieron al lugar, y que pidieron mantener el anonimato, contaron cómo decenas de pasajeros huyeron de allí, aún ensangrentados, refugiándose en vecindarios cercanos debido al miedo a ser arrestados por agentes de Migración. Quienes atendían a las víctimas afirman que muchos hablan solo la lengua maya y les cuesta expresarse en español.

Martín Martínez, vecino de la zona, describía la horrible escena que presenció, con numerosos cadáveres desperdigados en la carretera y otros todavía amontonados en el interior del tráiler , convertido en un amasijo de hierros: «Sacamos gente viva y gente muerta», declaró a la emisora Milenio Televisión. Otros llamaban a sus familiares para informarles de que seguían vivos, mientras de fondo se escuchaba: «Ya no aguanto el dolor».

El transporte de decenas de inmigrantes centroamericanos en camiones con rumbo al norte, desde Guatemala hasta los ansiados EE.UU. es una práctica ya habitual entre los traficantes. Este mismo lunes se localizó a 143 inmigrantes en el interior de un tráiler en el estado mexicano de Oaxaca. También entre ellos había una presencia mayoritaria de guatemaltecos (141), a los que se sumaban en esta ocasión dos nicaragüenses. El conductor y el copiloto del vehículo quedaron a disposición de la Fiscalía.

Este mismo viernes Interpol informó de una gran redada internacional en la que fueron detenidas más de 200 personas sospechosas de participar en un vasto tráfico ilegal de inmigrantes y trata de seres humanos en y desde América del Sur y Central. En la conocida como operación Turquesa , que se desarrolló entre los pasados 29 de noviembre y 3 de diciembre, se identificó además a 10.000 inmigrantes en situación irregular, procedentes de 61 países.

Muchos pagaron sumas «exorbitantes» a los traficantes para poder realizar pasajes a veces peligrosos, según el comunicado emitido por la organización policial, con sede en Lyon (Francia). En él se cita el ejemplo de 14 sospechosos arrestados en El Salvador, que cobraron a los migrantes entre 8.000 y 12.000 dólares (entre 7.100 y poco más de 10.500 euros) para hacerlos entrar en EE.UU.