Unicef cifra en 250.000 niños los afectados por el terremoto de Ecuador

Unicef y los socios humanitarios señalan que necesitan 23 millones de dólares para afrontar la crisis durante tres meses ; 14 millones solo para la provisión de agua, saneamiento básico e higiene. A las organizaciones sociales les inquieta también la existencia de niños perdidos o huérfanos.

Para los niños que vivieron el terremoto, la recuperación emocional es una tarea de más tiempo. Debemos ser guías para volver a la rutina con naturalidad. Ser sensibles para hablar de la fragilidad de la vida, comenta Alegría Crespo, directora de Educación Inicial Bilingüe de la Universidad de las Américas. Para ella «es momento de dar afecto y seguridad. De hablar con la verdad en lenguaje sencillo. De ayudarles a expresar sus emociones».

En el régimen educativo de la costa ecuatoriana las clases se inician en mayo, pero en la provincia de Manabí y en el cantón Muisne, de la provincia de Esmeraldas , golpeadas por el terremoto, comenzarán el 4 de julio. El seísmo dañó la infraestructura educativa. 394 instituciones presentan daños leves, 78 daños medios y 88 severo. Aún están en evaluación otras 284 instituciones educativas. Por ahora, se ha previsto colocar barracones en varias zonas.

Para los estudiantes de las zonas afectadas, las autoridades educativas han previsto un programa especial denominado «Escuela para todos, juntos nos levantamos». Con soportes psicológicos y actividades recreativas se intenta. Unicef alertó que el terremoto ha dejado sin acceso a la educación, de manera temporal, a 120 000 niños.

El coordinador humanitario de las Naciones Unidas en Ecuador, Diego Zorrilla , señaló que el desastre del 16 de abril en Ecuador es el mayor en la región desde el ocurrido en Haití, en 2010. En el sismo del 16 de abril murieron 659 personas, 41 están desaparecidas, hay miles de heridos y 29.087 en albergados.

Otro sector vulnerable que necesita especial atención es el de las personas con discapacidades. La Secretaría Nacional de Riesgos cifra en 840 el número de afectados por el terremoto. Todos están siendo atendidos: 268 en albergues y 126 en casa de familias acogientes. Estas personas reciben visita de brigadas de voluntarios y personal del Consejo Nacional de Discapacidades (Conadis).