Turquía ofreció quince millones de dólares a un asesor de Trump por entregar al clérigo Fetulá Gülen

Los nuevos datos surgen de las pesquisas realizadas por el FBI a quien está considerado uno de los personajes clave de la llamada trama rusa. El seguimiento de las actividades presuntamente delictivas del teniente general retirado, centradas en un favorecimiento a gobiernos extranjeros a cambio de contraprestaciones económicas , destapó también su conexión con el Gobierno de Turquía. La Oficina Federal constató que el pasado diciembre, cuando formaba parte del equipo del entonces presidente electo Trump, el teniente general Flynn mantuvo un encuentro con portavoces de Erdogan en el Club 21 de Nueva York. En aquella cita, en la que también estaba presente su hijo Matt, aunque no las personas que han aportado la información al FBI, los representantes de Erdogan le ofrecieron dinero para facilitar la entrega de Gülen, de quien Ankara demandado la extradición a Washington desde hace años. De haberse materializado el plan, publicado por «The Wall Street Journal», el clérigo habría terminado en la prisión de la isla turca de Imrali.

Fetulá Gülen, líder de un movimiento islámico que colaboró con Erdogan en el pasado pero que hoy está perseguido por su Gobierno, reside en Pensilvania desde 1999. El presidente turco aprovechó el intento de golpe de Estado en su país, el pasado año, para presionar con más fuerza a Washington y conseguir la captura del clérigo, a quien culpó de la asonada militar. Aunque en muchos círculos políticos y periodísticos se sigue manteniendo que los sucesos de Turquía fueron un autogolpe del propio Erdogan como excusa para acentuar su represión en el país.

El encuentro de Flynn y su hijo con los portavoces turcos formaría parte de los diversos contactos que ambos mantuvieron con representantes y con empresarios cercanos al Gobierno de Ankara, a quienes ofrecieron los servicios de Flynn Intel Group. Todo ello ocurrió antes de que Donald Trump nombrara al militar retirado Asesor de Seguridad Nacional, nada más tomar posesión, el 20 de enero. Flynn no duró en el cargo más que 24 días , después de que se desvelara que había ocultado sus contactos previos con destacados representantes del Kremlin, en particular el entonces embajador ruso en Washington, Sergey Kislyak. En plena polémica por la recién abierta investigación por la presunta intervención y connivencia del Gobierno ruso en favor de Donald Trump, el vicepresidente Mike Pence forzó la destitución del teniente general, tras comprobar que le había engañado.

Después de retirarse en 2014, cumplidos 33 años de servicio a las Fuerzas Armadas, Michael Flynn fundó la firma que le permitió desarrollar diferentes negocios de asesoramiento estratégico y de inteligencia, aprovechando sus contactos nacionales e internacionales durante su etapa como alto mando militar. Tras su salida de la Casa Blanca en marzo, el Pentágono abrió una investigación contra él. Más tarde, constituido el Consejo Especial, Mueller impulsó la investigación contra él , al considerarle uno de los principales personajes de la llamada trama rusa. Requerido también para una declaración formal ante el Comité de Inteligencia del Senado, Flynn eludió acudir y se acogió a la Primera Enmienda de la Constitución, aunque posteriormente entregó algunos de los documentos que la cámara alta le reclamaba. Recientemente, también ha sido llamado a declarar su hijo, Matt Flynn, como colaborador en las actividades irregulares de las que se le acusa a su padre.