Los rebeldes sirios atacarán para «defender al pueblo» tras oficializar la ruptura del alto el fuego

Los grupos rebeldes que se oponen al presidente sirio habían puesto el pasado viernes como fecha límite para que el mandatario pusiera fin a los ataques contra los opositores o tendría que hacer frente a las consecuencias. Al Kurdi ha incidido en que los rebeldes reclaman que la misión de observadores de Naciones Unidas se convierta en «una misión de imposición de la paz» o que la comunidad internacional adopte decisiones «audaces» e imponga una zona de exclusión para contribuir a la caída de Al Assad .

Los intensos enfrentamientos y los ataques contra puestos de control militar registrados este pasado fin de semana en varios puntos del país han dejado al menos 80 soldados del Ejército muertos a manos de las fuerzas rebeldes , según ha informado el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.

Algunos comandantes del Ejército Libre Sirio, el principal grupo armado insurgente, habían advertido de que sus fuerzas se sentirían «libres de cualquier compromiso» respecto al plan de paz si el régimen de no ponía fin a la violencia. La matanza de Hula (en la provincia de Homs), perpetrada el pasado 25 de mayo y en la que murió más de un centenar de personas -la mitad, niños-, ha supuesto el tiro de gracia para el plan de Annan, oficialmente en vigor desde el 12 de abril aunque, de hecho, nunca se ha cumplido.

«Estamos muy preocupados por lo que ha estado ocurriendo», aseguró el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon , ante la situación en Siria. Ban ha insistido en que el plan de paz del enviado especial de la ONU y de la Liga Árabe sigue siendo la principal herramienta para la resolución del conflicto sirio. «El plan de Annan sigue siendo central para la resolución de la crisis siria», ha asegurado, aprovechando para pedir de nuevo a Al Assad que detenga de inmediato la violencia «en el nombre de la Humanidad» y que abra un diálogo político con sus rivales.