El nuevo presidente del Parlamento Europeo, un político firme frente a Puigdemont

Los eurodiputados despidieron con un fuerte aplauso al que ha sido el presidente de la cámara hasta hoy, el también italiano Antonio Tajani, que ha vuelto a su escaño como diputado dentro del grupo parlamentario popular. Tajani no ha ocultado hasta el último momento sus ambiciones de repetir en el cargo un segundo periodo, como hizo en su día el anterior presidente socialdemócrata, el aleman Martin Schulz, pero finalmente se ha sometido al criterio de los equilibrios institucionales.

Puesto que se trataba de parte del pacto del reparto de los altos cargos de las instituciones de la UE, Sassoli fue el único candidato de los tres grandes partidos (populares, socialistas y liberales) que presentó su candidatura al cargo para ejercerlo durante la primera mitad de la legislatura de cinco años. Los socialistas habían pensado inicialmente en el búlgaro Sergei Stanishev, lo que habría ayudado a compensar a los países del Este de Europa a sentirse más incluidos en la nómina de presidentes comunitarios, pero su perfil no encajaba en los márgenes del difícil consenso entre las dos principales familias políticas.

El candidato del grupo conservador y reformista , donde militan los conservadores británicos y varios grupos de euroescépticos, era el checo Jan Zahradil, que logró el apoyo de 160 eurodiputados, mientras que la alemana Ska Keller, de los Verdes, logró 119 y la española Sira Rego, de la Izquierda Unitaria, se hizo con 43 votos. Ska Keller fue la única que tuvo la inoportuna idea de mencionar al nuevo presidente del Parlamento el caso de Oriol Junqueras y pedirle -sin éxito- que interviniese para «restablecer sus derechos», dado que si hubiera cumplido todos los requisitos, su partido, ERC, está afiliado al grupo parlamentario de los Verdes.

Una de las últimas gestiones del presidente saliente, Tajani, había sido precisamente contestar al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, que le pedía que le reconociese como eurodiputado . En ese caso, Tajani dijo que debía respetar la legislación española al respecto. Puigdemont llevó esta respuesta al Tribunal Europeo de Justicia, pidiendo medidas cautelares, pero los jueces se las denegaron.

Durante todo este tiempo, Sassoli ha respaldado sistemáticamente las posiciones de Tajani sobre el problema que plantean los independentistas frente a actitudes de otros grupos que han intentado asumir cierta simpatía con los soberanistas. En este sentido, la Comisión Europea anunció ayer que no admitía la propuesta presentada recientemente por el propio Puigdemont para lanzar una iniciativa legislativa popular con el objeto de promover la sanción a España . Puigdemont afirma que intentará recurrir esta decisión ante el Tribunal Europeo de Justicia.

En cuanto a la intervención de Rego en su primer día como eurodiputada, fue la menos votada de todos los aspirantes, después de estrenarse con un discurso atropellado y estridente que no pudo ni siquiera ser traducido por los intérpretes. Sus pronunciamientos políticos grandilocuentes en favor del feminismo y la igualdad ignoraron por completo que la víspera había sido nombrada por primera vez una mujer como presidenta de la Comisión Europea, el puesto de más relevancia de las instituciones comunitarias, y otra como futura responsable del Banco Central Europeo, la entidad rectora de una de las monedas más importantes del mundo, o que ella misma forma parte de una Asamblea en la que aproximadamente el 40% de sus miembros son mujeres.

En contraste, el nuevo presidente del Parlamento Europeo, que recordó que su padre había combatido en la última guerra mundial , pidió a los diputados que no abandonen «el espíritu de los padres fundadores, aquellos que dejaron de lado las hostilidades de la guerra para construir un proyecto que juntara paz, democracia, Estado de derecho y desarrollo».

Mientras tanto, representantes de cuatro grandes grupos, es decir, populares, socialistas, verdes y los antiguos liberales que ahora se denominan «Renovar Europa», continúan negociando un programa básico para la legislatura que debería estar listo antes de la votación en la próxima sesión de la candidatura de la alemana Ursula Von der Leyen como futura presidenta de la Comisión Europea.