Lakhdar Brahimi, relevo de Kofi Annan como enviado especial de la ONU en Siria

Las mismas fuentes diplomáticas han señalado que la designación oficial de Brahimi se producirá la semana próxima, si bien no han podido confirmarlo ya que puede producirse un cambio de última hora debido al recelo de algún país o el propio candidato, quién aún no se ha pronunciado sobre el anuncio hoy publicado.

De aceptar el cargo, el diplomático argelino tiene encomendada la difícil tarea de aplicar y llevar a término el programa de paz diseñado por su antecesor . Este proyecto, aceptado por el Gobierno y la oposición siria, recoge la retirada de tropas y armamento pesado desplegado en las ciudades, el cese de los combates, el acceso al país de las organizaciones humanitarias y la prensa internacional para ayudar a la población civil –verdadera perjudicada del conflicto- y el inicio de un diálogo entre ambos bandos.

La situación en Siria es dramática. Los combates entre el ejército sirio y los opositores al Gobierno de Bashar al Assad se suceden a lo largo y ancho del país, recrudeciéndose en las ciudades más importantes como Alepo o Damasco.

Como siempre, l a población civil es la que más sufre en este tipo de contiendas y todo indica que, por sí mismos, ambos bandos no son capaces de abrir un periodo de diálogo y alto el fuego que suavice la situación. Por ello resulta necesaria la actuación de organizaciones y personal diplomático con experiencia que siente a ambas partes en una mesa de negociación y alcance un mínimo acuerdo de paz.

A sus 78 años, Lakhdar Brahimi , licenciado en derecho y ciencias políticas, parece la persona indicada para conseguir estos fines, atendiendo a su dilatada carrera en la diplomacia internacional. Y es que el ex ministro de Exteriores de Argelia entre 1991 y 1993 ya ha participado en varias misiones para la resolución de conflictos internacionales . Y además, con éxito.

Entre sus logros figura el Acuerdo de Taif que puso fin a la guerra civil en Líbano en 1989, y que consiguió en calidad de enviado especial de la Lengua Árabe. Después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, Brahimi estuvo al mando de la misión de las Naciones Unidas en Afganistán . En 2004 viajó a Irak como emisario especial de la Secretaría General para colaborar en la instauración del gobierno interino.

En la actualidad, es miembro de « The Elders », un grupo de destacados líderes mundiales que trabajan para atajar los difíciles retos globales a los que se enfrenta el mundo en la actualidad. Esperemos que, si acepta el puesto como se prevé, en su nueva etapa como enviado especial de la ONU a Siria, Brahimi tenga más suerte que su antecesor en el cargo.