Maduro espera sorprender al mundo con las armas que fabricará su Consejo Militar Científico

«Vamos a activar por todo lo alto el "Consejo Militar Científico y Tecnológico" que le va a dar independencia en el sistema de armas a Venezuela», ha dicho Maduro, al asegurar que «va a ser de gran utilidad para la tecnología, la ciencia y la industria militar (...) se va a quedar impresionado el país y el mundo». En palabras del líder chavista, el organismo se instalará «en las próximas semanas».

El régimen venezolano mantiene aún el control del cuerpo castrense en el país, mientras el presidente interino, Juan Guaidó, no escatima esfuerzos para convencer a las Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) que se unan a su lucha y reconstruir la democracia de su país. Mientras tanto, Maduro ha ordenado a La FANB «estar prestos para rechazar cualquier incursión o agresión armada que pueda suscitarse en nuestras fronteras terrestres y marítimas. Preparémonos para defender nuestro amplio Mar Caribe y el suelo sagrado de Venezuela frente a cualquier enemigo», estampó en un mensaje por Twitter.

En Venezuela, a diario se registran protestas por la falta de agua, de electricidad, de gas y hasta por la escasez de combustible, aún así, el régimen dijo en septiembre que el país «tiene todo» para fabricar su propia artillería. China y Rusia han sido los principales proveedores de armas desde tiempos de Hugo Chávez, quien fue el primero en mostrar afán por superar a Estados Unidos como potencia. De esa manera, comenzó el Gobierno chavista a disponer de la petrochequera para dotar a la Fuerza Armada Nacional de equipos militares.

Pero con la crisis que inició en 2014, y que ahora Maduro achaca a Estados Unidos, no fue posible continuar con la compra, mucho menos hacer el mantenimiento de los aviones, tanques y armas que importó el país sudamericano. Con la latente amenaza de una posible intervención militar desde norteamérica, Maduro ha dicho que su Fuerza Armada está preparada para el enfrentamiento, aunque expertos en material militar lo ponen en duda por la poca capacidad operativa en la que se encuentran los equipos.