Lula planta cara a Micheletti: «No aceptamos ultimatums de golpistas»

Zelaya fue sacado por el ejército en pijamas de la residencia presidencial en la capital hondureña en la madrugada del 28 de junio pasado y desde ese entonces ha intentado tres veces retornar a Honduras, la última de las cuales tiene como escenario la Embajada de Brasil.

El gobierno interino que preside MIcheletti emitió ayer sábado un comunicado en el que solicita a Brasil que su embajada en Honduras “no se utilizada para llamar a la insurrección y dio un plazo de 10 días para que aclare la condición de Zelaya antes de tomar medidas adicionales”, que no fueron mencionadas.

Antes de viajar a Copenhague, el presidente brasilero dijo en Porlamar, capital de la Isla de Margarita, durante su intervención en la II Cumbre América del Sur-Africa, que “Zelaya es el presidente legítimo de Honduras” y que su estatus es ser “huésped de la Embajada de Brasil”.

“Si entran a la fuerza en la Embajada, violarían todas las normas internacionales. Pocas veces en la historia ha habido tanto consenso en la postura internacional contra el gobierno golpista . Brasil no tolerará un ultimátum de un gobierno golpista” , subrayó antes de partir de la cumbre margariteña, primero a Brasilia y luego a Copenhagen.

La II Cumbre de América del Sur y Africa, ASA, que ha tenido lugar en la isla de Margarita este fin de semana ha convocado la asistencia de más de 30 jefes de Estado y presidentes de las dos regiones.

El hombre fuerte de Libia, el coronel Muamma Al Gadafi, ha propuesto la creación de una Alianza del Tratado del Atlántico del Sur, OSAN, entre América y Africa, para enfrentar a la OTAN del Atlántico del Norte. El presidente venezolano aplaudió la iniciativa de su par libio.

La cumbre también produjo intervenciones menos guerreristas como la del presidente ecuatoriano, Rafael Correa, quien propuso la creación –sin condiciones- de un sistema financiero y un banco del sur para financiar los proyectos de inversión en los países africanos y sudamericanos.

De hecho, el anfitrión Hugo Chávez anunció que el documento de constitución del Banco del Sur, cuyo capital inicial de 20.000 millones de dólares será aportado por Venezuela, Brasil y Argentino, cada uno con 4.000 millones de dólares, podría extenderse también a los aliados africanos.