Un informe de ACNUR revela que la ruta migratoria hacia España es la que más personas se han dejado la vida

La imagen es de anoche, 56 personas, 54 hombres y 2 mujeres a bordo de una embarcación de Salvamento Marítimo, llegan al puerto de Almería. Eran rescatadas de una patera neumática semihundida en el mar de Alborán. Ellos lo han conseguido. El niño Aylan Kurdi, lo recordarán, su imagen dió la vuelta al mundo hace ahora tres años, no pudo cumplir su sueño. Desde entonces, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados, Acnur, publica un informe de las llegadas de inmigrantes y refugiados a Europa por las tres vías marítimas principales: España, Grecia e Italia. Un total de 318 personas migrantes han perdido la vida en el mar tratando de llegar a España en los primeros siete meses del año, una cifra que casi triplica a las 113 muertes registradas en el mismo periodo de 2017. Cruzar el Mediterráneo se ha convertido en una hazaña, muchas veces letal. De enero a julio, 1.512 personas han muerto en su viaje marítimo hacia Europa: 1.095 en ruta hacia Italia, 318 hacia España y 99 hacia Grecia. ACNUR denuncia que se han entorpecido las labores humanitarias de búsqueda y rescate, así como la llegada a puertos seguros.