Guaidó convoca otra gran marcha el 1 de mayo

Guaido recordó el día en que el país decidió ser libre de la dictadura de Maduro y ofreció disculpas por no haber logrado sacar a Maduro hasta el momento.

Su alusión histórica busca reforzar la ruta que se ha propuesto de ponerle fin a la usurpación de Maduro, crear un gobierno de transición y elecciones libres.

El plan de finalizar con la dictadura ha tropezado con muchos obstáculos luego de tres meses de lucha en los que Guaido enfrenta un bajón en su movimiento porque Maduro no da señales de querer dejar el poder. Y por el contrario ha reforzado su intención de continuar en Miraflores pese a las presiones internas y las sanciones internacionales contra cuatro docenas de altos cargos de su régimen.

Maduro ha recurrido al apoyo de sus aliados como Rusia, China y Cuba . Unos 100 militares rusos han desembarcado hace tres semanas, lo que disparado las alertas en el plano internacional y regional.

Ante la presencia militar rusa, Washington atizó el fuego sacando a relucir la opción militar para resolver la crisis de Venezuela. Sin embargo, el grupo de Lima, que agrupa a la mayoría de los países de América Latina se pronunciaron nuevamente contra la intervención militar en Venezuela y más bien exhortaron por la profundización de las presiones y las sanciones para acorralar al régimen de Maduro.

En su discurso en el cabildo de la plaza Bolívar de Chacao, Guaido resaltó los avances logrados en estos tres meses. Considero que Maduro y su entorno se encuentra debilitado aunque aparente lo contrario.

Guaido ha pasado esta semana santa recorriendo la provincia, con asambleas multitudinarias como fue en el caso de Maracaibo, estado petrolero de Zulia.

Las gigantescas marchas de los venezolanos, que han marcado un récord mundial, no han podido tumbar al régimen chavista, es cierto, pero si han sacudido los cimientos del usurpador.

Uno de los logros de Guaido fue la entrada de la ayuda humanitaria, por lo menos el que Maduro reconociera y admitiera la crisis humanitaria y permitiera que la cruz roja Internacional ingresara el convoy de medicinas para los 300.000 pacientes en estado de gravedad.

La entrada de la ayuda fue un logro de la presión internacional y nacional, aunque todavía la frontera con Colombia y Brasil continúa cerrada.

Guaido ha renovado el vigor y empuje de su móvimiento, pese al bajón que tuvo la semana pasada.

El desenlace de la crisis está cerca, «unas semanas», afirma Guaido. Aún falta por precisar, la reacción de los generales que controlan el alto mando militar.