Guaidó asegura que los militares rusos hacen el mantenimiento de equipos comprados por Chávez

«De aquí en adelante todo ha sido especulación, de aquí en adelante todo ha sido utilizado por el régimen », dijo Guaidó en un acto en Caracas y acompañado por dirigentes de diferentes partidos políticos y la prensa en el marco del relanzamiento de la Operación Libertad, que impulsaría la salida definitiva de Maduro.

Confesó que le llama la atención que el régimen chavista no haya declarado sobre el arribo de las aeronaves rusas en Venezuela. A su juicio, «no lo han dado porque la primera vez que dieron una versión oficial de Rusia sobre la supuesta llegada de ayuda humanitaria los desmintieron».

«Están haciendo creer a los poquitos militares que aún los apoyan que cuentan con Rusia y eso no es verdad. Hay una estrategia del régimen para hacernos creer en falsedades», dijo Guaidó. En ese sentido, rechazó como presidente también del Parlamento cualquier incursión que no sea aprobada por la Asamblea Nacional (órgano unicameral) y que viole la soberanía del país.

Guaidó, quien cumplió esta semana dos meses como presidente legítimo, reiteró que «el terreno de la lucha la pone el opresor (Maduro)». Sobre ese punto dijo que el artículo 187 de la Constitución venezolana, que permite una invasión militar extranjera, no es una amenaza política: «Es una opción constitucional pero no se toma al aire sino que son elementos de Estados».

Sobre su gabinete Ejecutivo, respondió a la pregunta realizada por ABC que anunciarlo en este momento sería «jugar por adelantado»: «Lo haremos cuando tomemos posesión . Cuando podamos ejercer las competencias». Al respecto precisó que pronto anunciará acciones para que los empleados públicos hagan desconocimiento público a los ministerios para los cuales trabajan, así como también a los encargados chavistas. «No apoyemos la usurpación».

Finalmente, Guaidó convocó a la sociedad civil para que este 30 de marzo tomen las calles en rechazo al segundo apagón nacional que se generó el lunes después del mediodía, y que aún el servicio se mantiene intermitente en el país, con el propósito de enviar un mensaje al régimen usurpador: «No nos vamos a acostumbrar a eso».