Fidel Castro sufre una caída al término de un acto multitudinario
El presidente cubano Fidel Castro sufrió
una caída con probables fracturas en una rodilla y un brazo, al retirarse este miércoles de un acto en la central ciudad de Santa Clara, 280 km al este de La Habana, relató poco después el propio mandatario.
" ... Les pido perdón por haberme caído, seguramente observo, para que nadie especule, que tengo alguna fractura en la rodilla y tal vez una en el brazo, tal vez, no es muy seguro todavía, pero estoy entero", dijo el líder cubano de 78 años ante las cámaras de la televisión, sentado en una silla, tras la
caída.
La caída de Castro, según se observó en la televisión, se ocasionó cuando se retiraba de un acto en esa ciudad, donde pronunció un discurso de una hora, por la graduación de primer Curso de las Escuelas de Instructores de Arte. "Cuenten con que haré todo lo posible, pero como ustedes ven, puedo hablar, aunque me enyesen, puedo continuar mi trabajo", aseguró Castro desde su silla, mientras que varios miles de personas presentes aplaudían y vitoreaban al líder.
En todo jocoso, añadió que "ahora estaré muy interesado en ver las fotos de
cómo me caí, la prensa internacional lo ha recogido, y seguramente mañana estará en las primeras páginas de los periódicos". "Pero no estoy triste, me siento lleno de felicidad por este acto, por lo que acabamos de ver", dijo Castro, vestido de su tradicional uniforme de campaña verde oliva. En una vista general del acto, se pudo observar de lejos imágenes cuando los escoltas y otras personas que acompañaban al presidente se volvieron corriendo, en medio de la confusión.
La cámara volvió a enfocar al público, que al percatarse de lo ocurrido, se pudo de pié, comenzó a aplaudir y a gritar consignas. El presidente solicitó que continuara el acto cultural previsto, mientras que fue retirado del lugar en un auto. Poco antes, acompañado del niño náufrago Elián González y su padre
-protagonistas de una saga de siete meses en el 2000-, Castro depositó una
ofrenda floral y guardó un minuto de silencio ante la tumba del revolucionario
cubano-argentino Ernesto Che Guevara.
Los restos de Guevara y de otros miembros de su guerrilla boliviana, están
depositados en Santa Clara en un memorial inaugurado el 17 de octubre de 1997, que cuenta con una plaza, un museo y el panteón subterráneo. El 23 de junio de 2001, Castro sufrió un leve desvanecimiento físico mientras hablaba en un acto público en el barrio de El Cotorro, en la capital cubana, atribuido "al calor y al sol excesivo" de ese día.
Unas ocho horas después, Castro compareció ante la televisión distendido y
animado para dar su versión del desmayo. "Cualquiera diría que me hice el muerto para ver el entierro que me hacían", dijo entonces Castro en broma, pero informó que otros 545 cubanos tuvieron que ser auxiliados por los cuerpos de salud debido a fatigas por el calor. A sus 78 años cumplidos en agosto, sin colgar su uniforme verde oliva, la barba cana y el andar cansino, Castro encara recurrentes especulaciones sobre su salud y su eventual sucesión con la disposición de seguir viviendo "entre ciclones".
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