Chávez pide el voto para evitar una «guerra civil»

«Este esfuerzo que yo estoy haciendo es para evitarle a Venezuela una guerra civil, para que no vayamos atrás, para impedir cien nuevos Caracazos », ha dicho, en alusión a las protestas de febrero de 1989 contra el Gobierno de Carlos Andrés Pérez, que se saldaron con cientos de muertos. Por ello, ha considerado que «hasta las familias ricas, piénsenlo bien, deberían votar por Chávez». «Nosotros garantizamos la paz, la estabilidad y la continuidad del desarrollo económico del país», ha aseverado.

El líder socialista ha señalado que el detonante del estallido social podría ser el «paquetazo» económico que la «extrema derecha» pretende implantar en el país, en el caso de que gane los comicios presidenciales, acabando con los programas sociales impulsados por su Gobierno. «Lo que ocurre realmente es que hay un paquetazo oculto, es asombroso el cinismo de los opositores diciendo que el paquetazo es falso, cuando andan ofreciendo nuevas misiones. Es un desespero total», ha dicho, en un contacto telefónico con una rueda de prensa del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).

En concreto, ha apuntado que la oposición pretende actuar sobre la industria petrolera nacional, recordando que su Gobierno ha fundado «un nuevo sistema económico, gracias a la recuperación de la Franja del Orinoco». «¿De qué sirve que el barril de petróleo esté en 200 dólares, por ejemplo, si 190 se los lleven las transnacionales, el resto los burgueses y nada el pueblo?», ha cuestionado.

En la misma línea, ha advertido de un ataque contra el sistema de organización política de comunas. «¿Dónde está escrito que eso vaya a debilitar las gobernaciones ? En ninguna parte», ha subrayado, en declaraciones recogidas por Venezolana de Televisión (VTV). A pesar de todo ello, ha apuntado que «los venezolanos pueden estar tranquilos» porque va a ganar las elecciones presidenciales «con bastante diferencia». «Quédense tranquilos, porque vamos a ganar el 7-O y no habrá paquetazo», ha aseverado. Además, ha considerado que, en este contexto, «el país necesita un liderazgo serio», lo que incluye «una verdadera oposición de derecha», por lo que ha instado a diferenciarla de la «extrema derecha». «El país necesita un movimiento de la derecha política y económica», ha sostenido.